Diez segundos. 9.8, para ser más exactos. Fue el tiempo que necesitó el Córdoba para adelantarse al Eibar en el Nuevo Arcángel, en el partido que abría la decimonovena jornada de la Liga BBVA, consiguiendo así el gol más rápido en lo que va de temporada y el cuarto más tempranero en la historia de la Liga.
El equipo armero sacó de centro, cuando Fede Cartabia presionó arriba para acabar robándole la pelota a Ekiza. El argentino, cedido al Córdoba por el Valencia, le pasó la pelota a Florin Andone, que se ha incorporado al conjunto andaluz hace pocas semanas, y el delantero rumano no falló ante Irureta.
Se trata del cuarto tanto más rápido en la historia de la Liga. El más tempranero lo marcó Joseba Llorente, que, con la camiseta del Valladolid, anotó contra el Espanyol a los 7 segundos en la temporada 2007/08.
El segundo más rápido fue de Darío Silva en un Málaga-Valladolid de la temporada 2000/01, a los 8 segundos, y el tercero del maliense Seydou Keita en un Almería-Valencia, disputado a finales del pasado mes de marzo, al marcar a los 8.5 segundos en el estadio Juegos Mediterráneos.
Sin embargo, el gol más rápido de la historia del fútbol corresponde a Ricardo Olivera. El 26 de diciembre de 1998, cuando militaba en el equipo de la ciudad de Fray Bentos, marcó a los dos segundos y cinco décimas frente al club Soriano en un torneo regional.