Partido a las doce en el Calderón, ambiente por todo lo alto en las gradas y una misión para ambos equipos: no dormirse en el inicio del choque. La falta de costumbre a veces puede jugar malas pasadas, pero en este caso, el Atlético no acusó el jugar en horas poco habituales para los futbolistas. Nada más comenzar, asedio rojiblanco. Arda y Mandzukic fueron los primeros en probar a Casilla y el turco vio como le anulaban un gol, todo ello en dos minutos. El Cholo abroncó a sus jugadores durante la semana por falta de intensidad, algo que no se repitió ante el Espanyol.
El Atlético comenzó mejor, dominando gracias a los omnipresentes Arda y Koke que, a falta de jugar en la portería, ocupan prácticamente todas las parcelas del juego rojiblanco y el Espanyol se encomendó a Sergio García. El catalán es el líder del equipo y como tal demostró sus galones. Una gran jugada suya por banda izquierda dejó el gol en bandeja a Lucas Vázquez que se encontró con un pletórico Moyá.
El paso de los minutos disminuyó el goteo de ocasiones para el Atlético de Madrid aunque no cesaron en su empeño. Koke desde fuera del área, una chilena espectacular de Raúl García y un cabezazo de Mandzukic mantuvieron en tensión a la defensa visitante. Las jugadas a balón parado no acababan en gol, pero también evidenciaban que el tanto atlético estaba cerca de llegar.
En los minutos finales de la primera parte llegó el merecido premio para los rojiblancos. La cabeza de Tiago, más joven a cada día que pasa, conectó a la perfección con un centro de Gabi y superó a Casilla. No era fácil el centro, de primeras, ni tampoco el remate. Buen gol. Rota la muralla españolista, la segunda parte se presentaba más abierta.
El segundo acto prometía más juego que el primero, como mínimo por parte de un Espanyol casi inerte en el juego ofensivo en la primera mitad. No fue así y el conjunto catalán fue incapaz de crear peligro ante un Atlético muy serio y muy tranquilo en tareas defensivas. Giménez, titular por la rotación de Miranda, y Godín formaron una pareja fiable durante todo el encuentro. La salida del campo de Sergio García fue la puntilla para un Espanyol sin chispa que sólo vio en un posible penalti un balón de oxígeno.
Uno de los mejores del partido estaba siendo Tiago, autor de primer gol y comandante del doble pivote junto a Gabi. El portugués estaba brillando hasta que tuvo que pedir el cambio. Fue un momento importante ya que entró el autor del segundo gol y el protagonista de las últimas horas por su posible salida del club: Mario Suárez. Poco después de que entrara el canterano hizo lo propio Griezmann y en unos minutos llegaría el 2-0. Jugada embarullada tras un golpeo a balón parado, Giménez gana el balón por alto y Mario en la línea de gol finiquitó el partido.
El Espanyol nunca se recuperó del segundo gol, puede que incluso del primero, y el resto del partido estuvo marcado por la desesperación de Mandzukic y Griezmann. Ninguno marcó y siguen sin golear con el Atlético como se esperaba de ellos. Un balón al palo del francés con el portero vencido evidenció la rabia que tienen en el cuerpo ambos arietes. Aún así, el Atlético gana y, por el momento, nadie parece preocupado.
El Atlético de Madrid consiguió los tres puntos, mantuvo la portería a cero y sigue intratable en el Vicente Calderón, su fortín particular. Lleva velocidad de crucero, pero da muestras de un margen alto de mejora. La estrategia y los goles de cabeza siguen siendo claves.