El Espanyol dominó el encuentro ante el Levante, pero no pudo doblegar a la disciplinada defensa de Joaquín Caparrós en Cornellà-El Prat pese a la insistencia en algunos tramos del encuentro, sobre todo en los últimos minutos tras la expulsión de Víctor Casadesús.
Los del mexicano Javier Aguirre controlaban la posesión y metieron al conjunto granota en su área. El bloque visitante se limitaba a esperar y no dispuso de oportunidades. El balón era de los blanquiazules: combinaban con fluidez ante una zaga muy poblada, pero no encontraban ocasiones claras.
El ritmo en el resto de la primera parte bajó muchos enteros. Faltas tácticas, juego detenido y apenas llegadas a las dos áreas. En la reanudación era el Levante el que intentó sorprender al Espanyol en la primera jugada. David Barral remató de cabeza y Kiko Casilla se estiró para despejar a córner.
Los de Caparrós presentaban más argumentos ofensivos en Cornellà en esta segunda mitad. Aún así, la receta no era perfecta y, en el 56, el portugués Simao tuvo un tiro claro desde punto de penalti tras una asistencia de Sergio García.
En el 68, los valencianos tuvieron cerca el gol: el checo Loukas Vyntra no pudo empujar un pase del austríaco Andreas Ivanschitz. Casilla lo atrapó prácticamente en la línea de fondo.
La tensión creció en el tramo final. Casadesús vio la roja en el 88 al frenar una contra del Espanyol, que buscaba con todo, ante diez, el primer tanto de la tarde. Cada córner era una oportunidad. No llegó y ambos conjuntos acabaron el encuentro con un punto cada uno, que mantienen la tranquilidad en la clasificación.
El ritmo en el resto de la primera parte bajó muchos enteros. Faltas tácticas, juego detenido y apenas llegadas a las dos áreas. En la reanudación era el Levante el que intentó sorprender al Espanyol en la primera jugada. David Barral remató de cabeza y Kiko Casilla se estiró para despejar a córner.
Los de Caparrós presentaban más argumentos ofensivos en Cornellà en esta segunda mitad. Aún así, la receta no era perfecta y, en el 56, el portugués Simao tuvo un tiro claro desde punto de penalti tras una asistencia de Sergio García.
En el 68, los valencianos tuvieron cerca el gol: el checo Loukas Vyntra no pudo empujar un pase del austríaco Andreas Ivanschitz. Casilla lo atrapó prácticamente en la línea de fondo.
La tensión creció en el tramo final. Casadesús vio la roja en el 88 al frenar una contra del Espanyol, que buscaba con todo, ante diez, el primer tanto de la tarde. Cada córner era una oportunidad. No llegó y ambos conjuntos acabaron el encuentro con un punto cada uno, que mantienen la tranquilidad en la clasificación.