Carlo Ancelotti y Gerardo Tata Martino se preparan para vivir su primer clásico del fútbol español, un partido que, a pesar de la prontitud con la que llega en el calendario, marcará gran parte de su futuro esta temporada. El clásico es un partido diferente a todos los demás y los técnicos son conscientes de que vivirán su primer gran examen desde que llegaron al Real Madrid y el FC Barcelona.
Hacer olvidar a Jose Mourinho y Tito Vilanova y conseguir convencer a sus aficiones son los objetivos más allá de los tres puntos que estarán en juego en el Camp Nou. Porque ambos entrenadores están viviendo sus primeras críticas al frente de sus equipos. Si echamos la vista atrás tan solo una semana, la sensación general otorgaría la condición de favorito al Barça. Es el líder en la clasificación, ha ganado un partido más que los blancos, sus cifras goleadoras son superiores (28 tantos por 19) y, además, juega en su estadio.
Sin embargo, en cuestión de siete días las sensaciones han dado la vuelta. El Real Madrid de Ancelotti llegaba con numerosas dudas al choque liguero ante el Málaga y el duelo en Liga de Campeones ante la Juventus. La victorias y el buen juego desplegado ha sido un golpe de moral para el italiano, que parece haber dado con la tecla en el juego madridista. Lo contrario ha sucedido con el Barça de Martino. La pasada jornada cosechó un gris empate ante Osasuna en El Sadar y, en su visita al AC Milan en Champions, tampoco pudo pasar del empate a uno, dejando tras de sí algunas dudas sobre el juego.
En este contexto, el duelo entre ambos conjuntos se vislumbra como ese punto de inflexión capaz de dar el empuje y la confianza necesaria a sus técnicos o, en el caso de perder, abrir el primer debate serio de la temporada. Elegir la estrategia y la alineación correcta cobra más importancia en un partido en el que la rivalidad y los sentimientos están por encima de todo lo demás. No obstante, ambos preparadores tienen experiencia para saber que estos duelos se viven de una manera distinta. Ancelotti nunca perdió sus duelos frente al Inter de Milán en Italia cuando dirigía a la Juventus y cosechó tres victorias y un empate entre 1999 y 2011. Además, en el clásico francés sumó dos triunfos y un empate en los duelos entre el Paris Saint-Germain y el Olympique de Marsella.
Aunque Martino no había entrenado antes en Europa, sí conoce la rivalidad e intensidad de los clásicos que se viven en Sudamérica. Cuando dirigía al conjunto uruguayo de Cerro Porteño en 2004, tuvo la oportunidad de vivir uno de los duelos más tensos frente a Olimpia en el clásico uruguayo. En total, se enfrentaron en cuatro ocasiones, dos en el torneo Apertura y dos en el Clausura, y el argentino no perdió ninguno de los partidos sumando dos vitorias y dos empates que le permitieron hacerse con los dos títulos. En definitiva, Ancelotti y Martino vivirán por primera vez el clásico del fútbol español con la experiencia suficiente para saber que un mal resultado puede cambiar el rumbo de toda una temporada.