Iker Casillas, capitán del Real Madrid, confesó a Pepe Reina, guardameta del Nápoles, en los minutos de calentamiento previos al España-Bielorrusia, que no se marchará del club y que espera tras ser elegido para jugar la Liga de Campeones, serlo también en Copa del Rey.
De acuerdo a las imágenes difundidas por la cadena de televisión Cuatro, Casillas no se plantea dejar el Real Madrid, pese a que no juega en la Liga, desplazado a la suplencia por Diego López. El capitán de la selección española vivió un momento difícil en Son Moix, tras conocer que el elegido por Vicente del Bosque para un partido decisivo sería Víctor Valdés por su falta de minutos en el Real Madrid, cuando reflexionó sobre su momento con su amigo Pepe Reina.
Mientras Valdés calentaba haciendo portería con José Manuel Ochotorena, entrenador de porteros de la selección española, Casillas conversaba con Reina. "¿Cuántos partidos pueden ser, diez o doce? Pero al final es una mierda de temporada, porque al final vas a jugar diez o doce partidos de Copa", le dijo Reina, en una conversación captada por las cámaras.
"Pero irme ahora. No lo veo, macho. Por lo menos jugaré la Copa. ¿Sabes que jugamos el primero en fin de semana?", respondió Casillas. El portero madrileño ya sabe que Del Bosque no puede mantener su rol de intocable si no tiene continuidad en el Real Madrid. "En estas últimas cinco semanas Iker sólo ha jugado un partido y hemos creído conveniente que jugara Víctor", fue la explicación del cambio que dio el seleccionador español.
Tras el triunfo de España 2-1 ante Bielorrusia, los internacionales españoles prefirieron no opinar sobre la situación en la portería. Algunos como el segundo capitán Xavi Hernández mostraron su apoyo a Casillas y confianza en Víctor Valdés. "Juegue quien juegue no lo va a notar la selección porque hay mucho nivel en la portería. Es Vicente quien tiene que decidir", dijo.
El debate parecía cerrado después de que Del Bosque mantuviese la titularidad de Casillas en la Copa Confederaciones, tras cinco meses sin jugar con el Real Madrid, y en Helsinki ante Finlandia tras prolongarse su condición de suplente con la llegada de Carlo Ancelotti. El seleccionador sorprendió hasta a los jugadores con su decisión y ahora debe decidir qué portero alinear el martes ante Georgia, si mantener sus argumentos para dar continuidad a Valdés o tener un gesto con Iker Casillas que nunca, sin estar lesionado -como ocurrió ante Finlandia en El Molinón o Francia en el Vicente Calderón-, se había perdido un partido oficial importante para la Roja.