Las aguas bajan revueltas en el Real Madrid después de la dolorosa derrota en el derbi ante el Atlético de Madrid. La plantilla blanca y Carlo Ancelotti se han conjurado para que el conjunto blanco supere el bache en este inicio de temporada.
Según infoma el diario AS, el entrenamiento del lunes sirvió para que los jugadores del conjunto blanco y el técnico aclarasen la situación del equipo. La tensión vivida en el choque ante los rojiblancos y los problemas en el juego fueron los temas tratados en la reunión.
Según apunta el diario, Sergio Ramos fue el futbolista que dirigió la charla, en la que también intervinieron Casillas y Cristiano Ronaldo, entre todos los futbolistas en presencia del entrenador. El sevillano recalcó que deben reforzar la unión del grupo y además se zanjaron algunas de las tensiones vividas entre los futbolistas en el partido.
Pepe y Benzema aclararon su desencuentro -el portugués reclamó durante el partido al francés su falta de intensidad- y el grupo también criticó la actuación de Álvaro Arbeloa en el algunos momentos del choque. Los jugadores coincidieron en que ellos son los culpables de la situación y necesitan trabajar más.
Tras la reunión en el vestuario, Ancelotti también tuvo un encuentro con Florentino Pérez y el director general del club, José Ángel Sánchez. El técnicó cenó con los dirigentes, que le trasmitieron su confianza para enderezar la situación del equipo en los próximos partidos.