Llegó el último día de fichajes y muchos equipos aún tenían los deberes por hacer antes del cierre del mercado. Muchos movimientos se produjeron sobre la bocina, como la salida de Mesut Özil del Real Madrid, que dejará 50 millones de euros en las arcas del conjunto blanco, tras su fichaje por el Arsenal.
Nervios, tensión y teléfonos echando humo en el último minuto de mercado, en el que el Real Madrid fue uno de los grandes animadores con las salidas del alemán y
Kaká y la esperada llegada de Gareth Bale, aunque no pudo dar salida a Coentrao. Pero el día no sólo se cerró con ese último fax que confirmaba la marcha de Özil, también hubo momentos curiosos como la aparición en la sede de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de unos supuestos representantes del Manchester United, que venían a depositar la cláusula de rescisión del centrocampista del Athletic Ander Herrera. Finalmente, los abogados se marcharon como llegaron y Herrera seguirá jugando en la Liga Española.
Otro de los equipos que se movió fue el Atlético de Madrid que confirmó la salida de Martín Demichelis al Manchester City y las llegadas del Alderweireld y Guilavogui. El defensa belga llega procendene del Ajax y el conjunto colchonero abonará 4,5 millones de euros, mientras que el centrocampista del Saint Etienne le costará 10 millones. El conjunto rojiblanco apuró hasta el final para tratar la venta de Adrián, pero finalmente no se produjo, al igual que la cesión de Giovinco, de la Juventus.
En el FC Barcelona no se produjo ningún movimiento. El capítulo de fichajes se había dado por cerrado, pero se esperaban salidas que finalmente no se produjeron. El club contaba con poder dar salida a Isaac Cuenca e Ibrahim Afellay pero, finalmente, no encontraron equipo y se quedan en la primera plantilla azulgrana.
El Granada y el Espanyol fueron dos de los equipos de Primera División que apuraron más y realizaron operaciones hasta el último minuto. El equipo catalán formalizó las salidas de Albín y Luna y consiguió las cesiones del rumano Torje y el delantero colombiano John Córdoba. Por su parte, los andaluces enviaron a Douglas Costa al Udinese y a Siqueira al Benfica y consiguieron las cesiones del lateral Matías Campos y el extremo del Mallorca Pereira.
En Segunda División, mención especial merece el Deportivo de La Coruña. El conjunto gallego protagonizó una situación esperpéntica que dio al traste con uno de sus fichajes. Augusto César Lendoiro citó a Marchena y Geijo para que superasen el reconocimiento médico con el equipo, pero la situación del club, inmerso en concurso de acreedores, provocó que sólo Marchena firmase con el equipo. El sueldo de ambos jugadores no fue admitido por los administradores concursales y, finalmente, Geijo encontró acomodo a última hora en el Mallorca.