El delantero del Celta de Vigo Iago Aspas asegura que se siente "decepcionado" tras conocer que el Comité de Apelación ratificó la sanción de cuatro partidos que le impuso el Comité de Competición por su agresión al deportivista Carlos Marchena durante el derbi gallego del pasado viernes en Riazor (3-1).
"La sanción ya me imaginaba que iba a ser de cuatro partidos, pero viendo los antecedentes de otros compañeros esperaba que a mí también me sacaran algún partido. Estoy decepcionado. No sé si hay agravio comparativo, pero sí que me molesta que no se tuviesen en cuenta los antecedentes de otros compañeros", indicó Aspas.
En su comparecencia ante los medios de comunicación, el máximo goleador del Celta confesó que esta semana está siendo "muy dura" para él: "Estoy jodido y molesto, esto no es un plato de buen gusto para nadie y no se lo deseo a nadie".
Aspas afirmó además no recordar "casi nada" de los momentos previos a su expulsión porque "estaba en tensión y se me fue de las manos. No recuerdo cómo fue todo pero creo que Marchena no me provocó".
"Era un partido muy importante y ver la cara de impotencia de mis compañeros al finalizar el partido hace que uno se siente culpable", agregó el delantero gallego, quien dijo entender las duras críticas que su compañero Mario Bermejo vertió contra él a la finalización del clásico que se disputó en Riazor. "El que la cagué fui yo y el que tiene que atenerse a las consecuencias también soy yo. Es normal y entiendo lo que dijo Mario porque estaba caliente después de correr como un pollo sin cabeza durante noventa minutos".