Iago Aspas, delantero del Celta de Vigo, ha sido sancionado con cuatro encuentros de suspensión por el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), por su expulsión en la última jornada de la Primera división tras agredir a un rival.
Iago Aspas, en el minuto 28 del derbi gallego Deportivo Coruña-Real Celta de Vigo (3-1), vio la tarjeta roja directa por "dar un cabezazo a un jugador contrario (Carlos Marchena) estando el juego detenido", según se recoge en el acta arbitral.
En sus alegaciones a Competición, el Celta había defendido que "si bien la misma estaba justificada por la acción realizada sobre el jugador rival, se trató de una acción aislada y, además, que median circunstancia que deben implicar que se califique como un hecho leve y no como una agresión".
"Entre esas circunstancias, menciona la existencia de provocación previa, el arrepentimiento espontáneo y posterior, o la inexistencia de daño", se añadía en las alegaciones presentadas por el club vigués.
El Comité de Competición, sin embargo, ha considerado que existió un "supuesto inequívoco de agresión y que dicha calificación no queda desvirtuada por ninguna de las circunstancias que se alegan por el club". Por ello, ha decidido suspender a Iago Aspas con cuatro encuentros, con multa accesoria en cuantía de 1.400 euros al club y de 3.005 euros al infractor.
El Celta, al conocer la sanción de cuatro partidos a Iago Aspas, ha anunciado que presentará un recurso contra la misma ante el Comité de Apelación.