Aranda se declara en rebeldía

El desencuentro entre el delantero Carlos Aranda y el Real Zaragoza se ha visto agravado hoy al expresar el jugador malagueño su intención de irse al Granada y no jugar "nunca más" con el equipo aragonés.

Según un comunicado del propio Zaragoza, Aranda le ha expresado al entrenador Manolo Jiménez al finalizar el entrenamiento matinal que "anímicamente no se encontraba bien" por el reciente fallecimiento de su abuela, a la vez que afirmaba su intención de no volver a jugar con el equipo aragonés.

La entidad maña califica la negativa del jugador a ser alineado con su equipo de "flagrante incumplimiento de su contrato", a la vez que recuerda que lo tiene en vigor hasta el próximo 30 de junio. "Carlos Aranda, así como cualquier otro jugador, solo saldrá de la disciplina del Real Zaragoza si se llega a un acuerdo satisfactorio para los intereses de nuestro Club", indica en el comunicado la entidad zaragozana.

Además insiste en que "el Real Zaragoza va a ejercer cuantas acciones considere oportunas para hacer cumplir las obligaciones y compromisos que se derivan del contrato suscrito con Carlos Aranda, abriendo para ello el correspondiente expediente disciplinario".

En su comparecencia en rueda de prensa, Jiménez ha dejado claro que algunos jugadores no iban a estar en el partido contra el Sevilla por diferentes problemas físicos, a la vez que puntualizaba que "Aranda no estará" y que reconocía que esta situación ya les ha "descentrado bastante".

También ha señalado que el jugador malagueño "anímicamente no está bien y tiene la cabeza puesta en otro sitio" y por eso no está dispuesto a "darle más tiempo, porque el Real Zaragoza tiene que estar por encima de un jugador", a la vez que emplazaba a que sea el propio jugador el que ofrezca las oportunas explicaciones de su situación personal.