El Valladolid, con una trabajada victoria en el Sánchez Pizjuán por 1-2, se acerca a Europa y deja al Sevilla en la mediocridad de la tabla tras un partido en el que encajó dos goles muy pronto y en la segunda parte, cuando quiso reaccionar, lo tuvo difícil al ser expulsado el chileno Gary Medel.
El equipo visitante sacó provecho a su primer acercamiento a la portería que defendió en esta ocasión Diego López, quien fue la gran sorpresa en la alineación local al quitarle el puesto por decisión técnica a Andrés Palop. Una contra por la banda izquierda no fue cortada por la novedosa defensa sevillista, con Juan Torres Cala y Alberto Botía como pareja de centrales por las sanciones del bosnio Emir Spahic y el argentino Federico Fazio, y el alemán Patrick Ebert, quien recortó muy bien el balón ante Fernando Navarro, y remató aún mejor ajustado a un palo para poner el 0-1 en el primer minuto.
El equipo que entrena el serbio Miroslav Djukic le ganó la partida completamente al de Míchel en el centro del campo, en el que se notó la ausencia de su mejor organizador, el croata Ivan Rakitic, quien estaba sancionado. La formación pucelana controló a la perfección las acometidas de los locales y a la contra fue letal ante la imprecisa defensa sevillista. Así, a los doce minutos, Óscar González aprovechó otro despiste defensivo del Sevilla para quedarse solo ante Diego López y meter el segundo, pero muy poco después el angoleño Manucho tuvo otra clarísima para el que hubiera sido el 0-3, aunque en esta ocasión el meta local tuvo una buena intervención.
El equipo hispalense, a partir del cuarto de hora, empezó a triangular y el delantero senegalés Babá Diawara, de cabeza, y Medel, en un par de intentos, pusieron en aprietos al portero venezolano Dani Hernández. Míchel se la jugó antes de que se cumpliera la media hora y tomó riesgos al sacar del campo al lateral derecho brasileño Cicinho para dar entrada al delantero chileno de 18 años Bryan Rabello, habitual en el filial de Segunda B y que debutó en el primer equipo al estar convocado por las lesiones de los puntas Álvaro Negredo y Manu del Moral.
El Sevilla tuvo otras buenas ocasiones de acortar distancias en las botas de Babá, pero la fortuna no estuvo del lado local en la misma medida que el Valladolid no se descompuso en su intento de irse al descanso con tan clara victoria e incluso aumentarla en contraataques ante una defensa adversaria en inferioridad numérica.
En el segundo tiempo salió el conjunto andaluz con las mismas ganas que acabó el primero, y tuvo premio a los cinco minutos, cuando en un saque de esquina Manucho, en su intención de despejar, metió de cabeza el balón en su portería. El 1-2 dejó el partido abierto porque los locales fueron constantes en sus aproximaciones en busca del empate ante un rival que tuvo menos tiempo el balón y fue menos atrevido en el ataque, aunque a los 63 minutos se complicó la posible remontada sevillista al ver Medel la segunda tarjeta y dejar a los suyos en inferioridad.
Entonces el Valladolid sí buscó sentenciar porque el Sevilla dejó muchísimos espacios libres al ir a la desesperada a por el segundo tanto, pero los visitantes perdonaron mucho y mantuvieron la incertidumbre hasta la conclusión.
Ficha técnica
Sevilla FC, 1: Diego López; Cicinho (Rabello, m.27), Cala, Botía, Fernando Navarro; Medel, Maduro (Kondogbia, m.50); Jesús Navas, Reyes, Perotti (Álex Rubio, m.78); y Babá
Real Valladolid, 2: Dani Hernández; Rukavina, Jesús Rueda (Peña, m.81), Marc Valiente, Balenziaga; Ebert, Álvaro Rubio (Sastre, m.74), Víctor Pérez, Omar (Bueno, m.84); Óscar y Manucho
Goles: 0-1, m.1: Ebert; 0-2, m.12: Óscar; 1-2, m.50: Manucho, en propia puerta
Árbitro: José Antonio Teixeira Vitienes (Comité cántabro). Expulsó por doble tarjeta amarilla al sevillista Medel (ms.44 y 63). Además, amonestó a Rukavina (m.11), Ebert (m.72), Dani Hernández (m.80), Peña (m.89) y Víctor Pérez (m.94), del Valladolid; y a Fernando Navarro (m.42) y Cala (m.53), del Sevilla
Incidencias: Partido de la decimocuarta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante unos 25.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. Se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento del expresidente del Sevilla Gabriel Rojas