Mauricio Pellegrino, el segundo entrenador destituido en Liga esta temporada, considera que la decisión adoptada por el consejo de administración del club es "fruto de un calentón y del miedo".
En una comparecencia sin preguntas en la ciudad deportiva de Paterna, el extécnico cree "injusto" su despido. "No comparto la decisión, pero esto es fútbol y es lo que hay", agregó. El Valencia, a la espera de los resultados de algunos partidos de la jornada del fin de semana, se encuentra en duodécima posición en la tabla y a cuatro puntos de los puestos de Liga de Campeones.
La clasificación para la Liga de Campeones es el principal objetivo del club de Mestalla en la presente temporada tanto por cuestiones deportivas como económicas. "La situación que vive el equipo es coyuntural. Estamos a cuatro o cinco puntos de la zona de Champions, vamos a jugarnos el primer puesto de nuestro grupo en la Liga de Campeones y nos espera Osasuna en la Copa del Rey. La imagen ofrecida en los dos últimos partidos, sobre todo en el último, ha sido coyuntural", recalcó.
El Valencia perdió ante la Real Sociedad en un encuentro en el que jugó la segunda parte en inferioridad numérica y en el partido anterior perdió en Málaga por 4-0.
Pellegrino agregó que se siente "responsable" y "dolido" por la situación en la que se encuentra el equipo, señaló que cree en los procesos de trabajo y recordó que firmó un contrato por dos años.
También recordó que con Héctor Cúper y Rafa Benítez en el banquillo del Valencia se vivieron cuatro o cinco pañoladas, pero que al final la gente se sintió orgullosa del equipo.
El ya exentrenador del Valencia quiso agradecer el apoyo de la afición y la oportunidad que le han dado. "He pasado entre la etapa de jugador, técnico de la cantera y primer entrenador cerca de diez años en el club. Ojalá la vida me dé otra oportunidad de volver", concluyó.