El derbi sevillano ha calentado motores fuera de los terrenos de juego y de la forma menos deportiva posible. Un centenar de hinchas se han embaucado en una pelea que se ha saldado con dos agentes de Policía Nacional heridos y 27 personas detenidas. Al mediodía, varias personas alertaban a los cuerpos de seguridad sobre la presencia de unos 20 individuos de "aspecto neonazi", con insignias de un equipo de fútbol, sin especificar, que estaban causando disturbios, según ha informado la Policía.
Cuando los agentes se han personado en el lugar, han visto cómo otro grupo aficionados, unas 80 personas, se acercaban. En ese momento han empezado a volar objetos y ha comenzado una "batalla campal". Según los medios locales sevillanos, se trata de una trifulca entre hinchas rivales, del Sevilla FC y el Real Betis Balompié, aunque la agencia Europa Press asegura que eran aficionados del mismo equipo. Los detenidos están acusados de atentados a la autoridad y riña tumultuaria.
Este enfrentamiento se produce en el marco del encuentro futbolístico que disputan los dos equipos de la ciudad, declarado de alto riesgo por la Comisión Nacional Antiviolencia.