Nueva lucha de titanes en el Camp Nou, donde el Barcelona y el Real Madrid han firmado un empate (2-2) que deja todo como estaba, con los culés manteniendo la ventaja de ocho puntos sobre el eterno rival. Ha sido un partido de poder a poder, con dos equipos con estilos distintos y en el que han sobresalido sus estrellas, Leo Messi y Cristiano Ronaldo. El argentino y el portugués han marcado un doblete cada uno en un partido vibrante y en el que los azulgranas pudieron llevarse la victoria en los últimos minutos al gozar de dos buenas ocasiones.
El Camp Nou vistió sus mejores galas para ver en acción a los dos mejores equipos de España y posiblemente del mundo. Tito Vilanova sorprendió de inicio al situar como central a Adriano junto a Mascherano, ante las ausencias de Puyol y un Gerard Piqué que a última hora se quedaba fuera del corte al no recuperarse plenamente de su lesión en el tobillo. En el Madrid, Mourinho optó por dar la titularidad al discutido Özil, formando ese famoso "triángulo de presión alta", como lo define el propio técnico portugués, junto a Khedira y Xabi Alonso, y a un Benzema que viene cotizando al alza en los últimos encuentros.
Empezó mejor el Madrid, saliendo con peligro a la contra y haciendo gala de su fútbol directo. La primera ocasión corrió a cargo de Benzema con un remate mordido, tras centro de Cristiano, que salió muy desviado. Poco después lo intentó Sergio Ramos al rematar de cabeza un córner botado por Özil que salió desviado por centímetros. El Barça tenía la pelota, pero su juego era lento y le costaba horrores acercarse a la portería de Iker.
El 0-1 llegó en el ecuador de la primera mitad. Cristiano recibió por la izquierda un preciso pase de primeras de Benzema y, tras beneficiarse del fallo defensivo de Dani Alves, se presentó en el área para batir a Valdés con un zurdazo inapelable. Como en los tres últimos clásicos, el Madrid volvía a asestar el primer golpe al rival.
Estaba crecido el equipo de Mourinho, que pudo haber ampliado la cuenta sólo dos minutos después con un remate del delantero francés que se estrelló contra la madera después de una buena acción de Di María dentro del área.
A Tito Vilanova le crecían los enanos porque Alves se lesionaba poco después y tuvo que dejar su puesto a Montoya. Pero el Barcelona logró superar los contratiempos con el tanto del empate, obra de Messi a la media hora. Pedro recibió un balón por la derecha –posiblemente en fuera de juego– y su centro no pudo despejarlo con claridad Pepe ante la oposición de un Xavi que pudo estar haciendo falta. La pelota quedaba muerta en el área y Leo, llegando con todo desde atrás, la cazó para conectar un tremendo derechazo ante el que nada pudo hacer Casillas. El primer despiste defensivo lo acabó pagando muy caro el Madrid.
El tanto del empate espoleó al Barça, que metió una velocidad más a su fútbol y poco a poco llegaba al área rival, generando mucha sensación de peligro. En el otro bando, Özil iba de más a menos, como viene sucediendo en los últimos partidos.
Altas pulsaciones
El alemán tenía todas las papeletas para ser sustituido en el descanso, como ocurrió en el último encuentro liguero ante el Deportivo (5-1), pero Mourinho optó por mantenerlo en el campo. Tampoco Tito Vilanova movió el banquillo en el descanso. Y fue precisamente el mediapunta germano el protagonista de la primera acción de la segunda parte al ser objeto de un posible penalti que Delgado Ferreiro no señaló. La réplica la puso después Iniesta, que cayó en la misma raya del área ante Pepe. El público del Camp Nou se echó encima del colegiado vasco, que tampoco pitó nada en esta ocasión.
El partido se jugaba a tumba abierta por parte de los dos contendientes, dispuestos a asestar la próxima cuchillada que pudiera decantar la contienda. Cada uno fiel a su estilo. Y fue a la hora de partido cuando Messi hizo otra vez de las suyas. Como en la vuelta de la Supercopa de España, el argentino volvía a superar a Iker con un golazo de falta directa. Un golpeo magistral por parte de la Pulga ante el que nada pudo hacer el capitán madridista.
Con más de veinte minutos por delante, los dos equipos recurrieron a sus armas, aunque fueron los azulgranas el que más se acercó a la portería rival. Messi volvió a avisar de sus intenciones con un peligroso centro-chut al que no llegó por poco Alexis, mientras que Higuaín lo intentó con un remate escorado que salvó Valdés. El argentino sigue negado de cara al gol en las últimas semanas y su equipo lo está echando en falta.
En la recta final fue mejor el Barça, movido al ritmo de Iniesta, y en los últimos minutos tuvo dos claras ocasiones para haber desnivelado la contienda. La tuvo primero Montoya, a dos minutos del final del tiempo reglamentario y tras una jugada de salón, aunque su trallazo desde fuera del área se estrelló en el larguero. Ya en el descuento, fue protagonista Pedro, quien tras recibir un gran pase en profundidad de Iniesta y trazar la diagonal, probó fortuna con un remate que salió desviado por muy poco.
Al final, empate en un partido vibrante que deja las cosas como estaba. Un punto que le puede saber a gloria porque ha visto cómo el Madrid no logra aproximarse, aunque todavía falta un mundo por delante para la finalización del campeonato. ¡Que viva el espectáculo!
Ficha técnica
FC Barcelona, 2: Valdés; Dani Alves (Montoya, m.27), Mascherano, Adriano, Jordi Alba; Busquets, Xavi, Cesc (Alexis, m.62), Pedro, Messi e Iniesta
Real Madrid, 2: Casillas; Arbeloa, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Di María (Essien, m.87), Özil (Kaka, m.80), Cristiano Ronaldo; y Benzema (Higuaín, m.62)
Goles: 0-1, m.23: Cristiano Ronaldo; 1-1, m.30: Messi; 2-1, m.60: Messi, de falta directa; 2-2, m.66: Cristiano Ronaldo
Árbitro: Delgado Ferreira (Comité vasco). Mostró cartulina amarilla a Pedro (m.39), Busquets (m.53), del Barcelona; y a Xabi Alonso (m.43), Özil (m.58), Pepe (m.77) y a Arbeloa (m.89)
Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada de la Liga BBVA disputado en el Camp Nou ante 96.589 espectadores. En el palco se encontraban, entre otros, el presidente de la Generalidad, Artur Mas; el alcalde de Barcelona, Xavier Trías; el director de la oficina de la ONU sobre el deporte para el Desarrollo y la Paz, Poul Hansen; y el mítico exjugador de la NBA Magic Johnson. Antes del inicio del partido, el Camp Nou se vistió con un gran mosaico formado por 98.000 cartulinas con la señera catalana y la palabra "Barça" como protagonistas. Miles de espectadores lucieron banderas independentistas en las gradas