El entrenador del Barcelona, Tito Vilanova, ha comentado en rueda de prensa que "cualquier equipo del mundo notaría la ausencia de sus centrales" titulares, en referencia a las lesiones de Carles Puyol y Gerard Piqué, con vistas a un clásico que el técnico no afronta como la posibilidad de dar "un golpe moral" al Real Madrid.
Con la baja segura de Puyol por una luxación de codo, el enigma residirá hasta última hora en si contará con Piqué, que apura la recuperación de su lesión de tobillo, o si bien apostará por el centrocampista Alex Song como su sustituto en el eje de la zaga.
A Song "le falta tiempo", ha admitido Vilanova, quien ha recordado que cuando Javier Mascherano se encontró ante esa misma situación, ya llevaba más tiempo en el vestuario. "A Song lo fichamos para jugar en esta posición, pero en momentos puntuales". "Tenemos la suerte de que ha aprendido rápido, pero lo traíamos para jugar de pivote y, como central, ha tenido que hacerlo antes de tiempo. Cualquier equipo en el mundo, si tuviera sus centrales lesionados, notaría su ausencia", ha dicho Vilanova.
En una multitudinaria rueda de prensa en el Camp Nou, la última antes del clásico, el técnico catalán ha afirmado que es consciente del peligro de los contragolpes del Real Madrid. "El peligro lo solemos tener en los balones a la espalda, porque saben que tenemos la defensa muy adelantada -ha explicado-. Claro que lo puedes evitar renunciando al juego de posesión y tirando balones largos, pero eso no lo vamos a hacer".
Por ello, el Barcelona seguirá apostando por su estilo en un partido en el que, de ganar, marcaría una distancia de once puntos entre ambos equipos en la tabla, algo que Tito "no" se plantea. "Pienso en ganar un partido, tres puntos, con la opción es verdad de quedarnos a once. Esa posibilidad nos haría pasar unos días más tranquilos y la gente estará más contenta por la calle, pero no me planteo como un golpe moral o dejarlos tocados", ha aseverado.
Porque, a su juicio, "en un partido así nunca hay un favorito, independientemente de los puntos. Incluso a veces el equipo que va por debajo tiene más ganas. Queda muchísima liga, muchísimos partidos complicados. Es muy pronto". "En el primer año en el primer equipo -ha recordado-, nos pusimos doce puntos por encima en la jornada quince y tuvimos que ir al Bernabéu a ganar esa Liga. Imagínate ahora en la jornada siete".
Convencido de que su rival no variará su planteamiento respecto a anteriores partidos, precisamente el técnico ha reconocido que el mejor encuentro de su equipo en esta temporada fue el de la ida de la pasada Supercopa de España. "Fue el mejor con diferencia. Si hay cosas que pueden servir para reforzarnos, las utilizaremos".
Para ese objetivo no ha decidido aún el once que dispondrá sobre el césped, aunque sí ha elogiado a algunos de sus jugadores, como Cesc y Alexis, a los que "si les quitara la confianza sería mucho más difícil para ellos demostrar cosas", o a Messi, del que "ya no se puede decir más que no se haya dicho ya". "El ambiente es de saber que tenemos un partido que es importante, pero estos jugadores no me dejan de sorprender por la tranquilidad con la que encaran este partido", ha admitido Tito.
Y con esa misma tranquilidad, ha restado importancia al posible récord de victorias consecutivas en un arranque de Liga en la historia del Barcelona. "Si hemos sido capaces de hacer eso y ser los únicos, demuestra que no es fácil. Llegamos en el mejor momento, sí, pero habrá muchos momentos en los que estaremos mejor".