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Sergio Ramos pide disculpas a Mou y a los jugadores

El defensa asume la culpa y pide perdón a sus compañeros y al técnico José Mourinho.

Marcelo, Sergio Ramos y Di María, observados por Mourinho en el entrenamiento. | EFE

Respira el Real Madrid. Uno de los conflictos que más ha preocupado al club en los últimos tiempos ha escrito este miércoles su final en una reunión tan necesaria como inesperada. Sergio Ramos, capitán y peso fuerte en la plantilla, y José Mourinho, líder único para muchos madridistas, han zanjado sus diferencias. Los debates y las tertulias sobre quién tiene razón han perdido su significado. "Hacía falta algo así para tranquilizar un ambiente tenso en la plantilla", dicen desde el club, ahora más aliviados.

El día transcurría con normalidad. Sesión de estiramientos y todos camino a la reunión previa al partido. Una sala con 23 jugadores del primer equipo y todo el staff tecnico del Real Madrid están callados. Escuchan con atención a una persona. Y no es Mourinho dando la charla táctica. Es un capitán asumiendo sus errores, aceptando que se ha equivocado. Es Sergio Ramos. Sin que estuviera en el orden del día, el central, por voluntad propia, tomaba la palabra para dar un discurso que puede cambiar para bien el rumbo del equipo en una temporada que no ha comenzado como nadie deseaba.

El sevillano, consciente de su error al ponerse la camiseta de su compañero Mesut Özil, pedía disculpas a todos sus compañeros y a su entrenador por haber hecho algo que él mismo no entendía y rechazaba hace unos días. Resolver las cosas de familia de puertas para afuera.

Tan importante como la iniciativa de Ramos era la respuesta de Mourinho. Era el momento que deseaba. Tenía en sus manos aunar más a la plantilla. Y no ha perdido la oportunidad. El técnico ha agradecido la humildad del jugador y ha restado importancia al hecho. Le ha dicho a título individual que no tiene ningún problema con él. A título colectivo, ha pedido a la plantilla el máximo compromiso de todos. Ha sido la victoria del bien común por encima de los egos: "Se ha comenzado a ganar la Décima".

Qué mejor escenario para comenzar una nueva etapa que el Amsterdam Arena, estadio donde se logró la séptima Copa de Europa, para que se produzca el auténtico cambio de este Real Madrid.

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