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El Barça se encuentra con una victoria en el Pizjuán

El choque traerá mucha polémica, por la expulsión de Medel y por el tanto del empate de Cesc, pero lo cierto es que el Barcelona remontó un 2-0.

El choque traerá mucha polémica, por la expulsión de Medel y por el tanto del empate de Cesc, pero lo cierto es que el Barcelona remontó un 2-0.
Fàbregas, en el momento de anotar el primer tanto. | EFE

El Barcelona se ha encontrado con una victoria en el Sánchez Pizjuán en un choque que en el minuto 89 estaba perdiendo. Dos goles en tres minutos de Fàbregas –que ya había anotado antes- y David Villa dejaron hundido al Sevilla, que tocó la victoria con los dedos de las manos.

Hubo muchas protestas de jugadores y aficionados sevillistas, primero por una expulsión que provocó que los de Míchel jugaran media hora con uno menos, y después por unas manos en la jugada del tercer y definitivo tanto. Pero lo cierto es que el Barcelona ha tirado de casta y carácter para darle la vuelta a un partido que ha sido una oda al fútbol.

Una batalla táctica

El Sevilla saltó muy bien plantado al terreno de juego desde el primer minuto. Como era de esperar, el balón fue propiedad del Barcelona, que trató de imprimir un elevado ritmo. Pero apenas era capaz de crear peligro. Primeramente, por el excelente trabajo de presión del doble pívote sevillista, Medel y Maduro, que cuajaron una magnífica actuación hasta que les dejaron. Y segundo, por la falta de claridad de ideas de Alexis y sobre todo Pedro, que no tuvieron su noche.

Además, con unos inspiradísimos Navas y Negredo, el cuadro hispalense hacía daño cada vez que podía salir a la contra. Y en una de ellas llegó el primer tanto del encuentro. Trochowski, quien ya marcara en la victoria ante el Madrid de hace quince días, se encontró con un balón en la frontal, y con un duro disparo superó a Víctor Valdés.

Con ese resultado se llegó al descanso, pero en la reanudación las cosas se iban a poner mejor para los sevillistas. Otro robo de balón en el centro del campo terminó en un balón en profunidad para Negredo que, después de deshacerse a Song con una facilidad pasmosa, superó a Valdés con una vaselina sublime.

Poco le duró la ventaja de dos tantos al Sevilla, porque sólo cuatro minutos después Fàbregas acortó distancias con un zurdazo desde fuera del área. A partir de ese momento el partido se rompió, con los dos equipos sin dejar de buscar la portería contraria, con la sensación de que el gol podía llegar en cualquier de los dos bandos.

Hasta que Mateu Lahoz se inventó la expulsión de Medel. El chileno se enzarzó con Fàbregas y le soltó un leve, muy leve, cabezazo; el de Arenys se fue al suelo buscando al reacción del colegiado, que a instancias de su asistente decidió dejar al Sevilla con uno menos.

De ahí al final –quedaban 20 minutos– el Barcelona fue el dueño y señor del partido, encerrando a su rival en el área que, con un Spahic colosal, resistía espartanamente para amarrar una victoria que de cada vez veía más cercana. Pero ya en el 89 una pared endiablada entre Fàbregas y Messi dentro del área terminó con el tanto del primero, su segundo en la noche.

Parecía que ese era el último zarpazo, que ahí se iba a terminar la remontada y alegría azulgrana, y la decepción sevillista. Pero en otra genialidad dentro del área, cuando ya se llevaban tres minutos del tiempo extra –el cartelón había anunciado cinco más– David Villa logró la hazaña. Y estalló el júbilo. Y la locura. Por ambos bandos. Los azulgrana, por encontrarse con una victoria inesperada en el último momento; los sevillistas, por caer derrotados cuando más duele, y por unas posibles manos de Thiago Alcántara en la generación del tercer tanto que todos, futbolistas y aficionados, protestaron.

Pero el marcador ya no se iba a mover. Queda la sensación de que el Sevilla lo tuvo, pero que tendrá que conformarse con la alegría de verse capaz de ganar a cualquiera. Y de que el Barcelona, por mucho que se diga y se dirá que ya no juega tan bien, que no es el mismo, que ha perdido fuelle... ha conseguido su sexta victoria consecutiva en Liga, firmando un pleno histórico, y asegurándose llegar al clásico del próximo domingo con, como mínimo, ocho puntos de ventaja sobre el Real Madrid. Que sigan hablando, pensará Vilanova.

 

Ficha técnica

Sevilla, 2: Palop; Cicinho, Botía, Spahic, Fernando Navarro; Maduro; Jesús Navas, Medel, Rakitic (Kondogbia, m.76), Trochowski (Manu del Moral, m.38); y Negredo (Luna, m.80)
Barcelona, 3: Valdés; Alves (Villa, m.79), Mascherano, Song, Jordi Alba; Xavi, Busquets (Thiago, m.76), Cesc Fábregas; Alexis (Tello, m.70), Messi y Pedro

Goles: 1-0, m.25: Trochowski; 2-0, m.48: Negredo; 2-1, m.52: Fàbregas; 2-2, m.89: Fàbregas; 2-3, m.93: Villam
Árbitro: Antonio Miguel Mateu Lahoz (C. Valenciano). Expulsó con roja directa al sevillista Medel (m.72), por agredir a un contrario, y al técnico Míchel (m.89), por protestar tras el empate a dos del Barcelona. Amonestó a los locales Rakitic (m.28) y Botía (m.95), y a los visitantes Busquets (m.70) y Mascherano (m.75)
Incidencias: partido de la sexta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, que rozó el lleno con casi 45.000 espectadores. Césped en perfecto estado

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