"Es demasiado arriesgado". Con esas palabras, Adriano Galliani, administrador delegado del Milan, dejaba entrever que el club rossonero se retira de la puja por Kaká, a quien pretendían incorporar esta temporada en calidad de cedido, a tres días para que se cierre el mercado de fichajes.
Este lunes, en declaraciones a Milan Channel, el dirigente del club se refería así a las negociaciones por el brasileño, que en 2007 conquistó el Balón de Oro y el FIFA World Player, además de proclamarse campeón de Europa, vistiendo la camiseta rossonera.
"Hemos recibido el último informe que esperábamos, de un notable experto fiscal español, y la operación es demasiado arriesgada. ¿Mercado cerrado? No sé si es para tanto, ya veremos. A Allegri le gusta Bojan", decía Galliani, tratando tal vez de ilusionar a una afición milanista que el pasado domingo vio cómo el equipo perdía contra la Sampdoria (0-1) en el arranque de la Liga italiana.
Las palabras del administrador delegado del Milan, que este miércoles, por invitación de su amigo Florentino Pérez, estará en el palco del Santiago Bernabéu para ver la vuelta de la Supercopa de España entre el Real Madrid y el Barcelona, no hacen sino tensar la cuerda: el Madrid sigue esperando a poder desprenderse del jugador y éste ve cómo el tiempo se le agota y apenas le van quedando salidas.
¿Regreso a Brasil?
El último episodio del culebrón Kaká, que como el de Luka Modric también está yendo para largo, lo protagoniza la esposa del futbolista brasileño. En una entrevista a un medio de su país, Caroline Celico asegurad que están preparando la vuelta a Sao Paulo, por lo que el jugador podría volver a Brasil para seguir allí con su carrera deportiva después de que el acuerdo con el Milan se antoje prácticamente imposile.
Cabe recordar que Kaká defendió la camiseta del Sao Paulo hasta 2003 antes de recalar en el Milan, donde se consagró como uno de los mejores futbolistas del mundo.