L D (EFE) Landis explicó que siempre esperó el momento de subir a lo más alto del podio de los Campos Elíseos. "Por eso ahora siento algo distinto, especial. Llegar a ser el líder de un equipo, tener el maillot amarillo, ganar el Tour, todo eso supone mucho trabajo, muchos sacrificios, y yo estaba preparado para eso. Por fin lo he conseguido, es realmente algo especial", dijo Landis. La clave del triunfo de Landis estuvo en asimilar "el peor momento" de su vida, cuando fue "humillado" por sus rivales en las rampas del inédito puerto alpino de La Toussuire. De aquella frustración salió lo mejor del campeón del Tour.
"Muchas veces reacciono por emociones, pero la mayor parte de ellas son controladas, calculadas. Después de mi desfallecimiento en La Toussuire debía recuperar diez minutos. Aquello fue un golpe de ira. Luego tuve que reflexionar. Lo que me motivó es que tenía que ganar", explicó Landis. Aparte del golpe de coraje del líder del Phonak, el director del equipo y el propio corredor se dejaron aconsejar por "los viejos", entre ellos el padre del técnico, Bob Lelang y "un tal Eddy Merckx". "Unas horas después de la etapa comencé a sentirme mejor y me reencontré con mi espíritu de lucha, con ganas de ir al combate. Eddy Merckx me dijo que era posible remontar, que él lo hacía en su época", recordó.
Landis admitió que de no haber ganado el Tour este año su ilusión se hubiera esfumado posiblemente para siempre, ya que a los 30 años deberá someterse a la implantación de una prótesis en la cadera al final de temporada. "Hubiera sido frustrante no ganar el Tour y luego operarme y no tener más oportunidades de venir al Tour de Francia. Es el deporte más bonito y estoy orgulloso de practicarlo. Tal vez era mi última oportunidad", comentó.
El sucesor de Lance Armstrong admitió que su experiencia en el US Postal junto al texano fue muy positiva, aunque para intentar ganar el Tour debió tomar la decisión de marcharse. "Tuve suerte de formar parte de ese equipo. Pocos corredores han podido tener esa experiencia y vivir al cien por ciento por y para el Tour, sin dejar de pensar nunca que es posible conseguirlo"
Respecto al asunto del dopaje, Landis no es partidario de dar muchas explicaciones y solicita otro tipo de preguntas. "Es un tema que no quiero tratar. Mi deporte lucha contra el dopaje y trata de prevenirlo, y es por ello que tiene esta reputación. Son los padres los que tienen que explicar las cosas a sus hijos y enseñarlos, como hicieron mis padres conmigo", concluyó.
"Muchas veces reacciono por emociones, pero la mayor parte de ellas son controladas, calculadas. Después de mi desfallecimiento en La Toussuire debía recuperar diez minutos. Aquello fue un golpe de ira. Luego tuve que reflexionar. Lo que me motivó es que tenía que ganar", explicó Landis. Aparte del golpe de coraje del líder del Phonak, el director del equipo y el propio corredor se dejaron aconsejar por "los viejos", entre ellos el padre del técnico, Bob Lelang y "un tal Eddy Merckx". "Unas horas después de la etapa comencé a sentirme mejor y me reencontré con mi espíritu de lucha, con ganas de ir al combate. Eddy Merckx me dijo que era posible remontar, que él lo hacía en su época", recordó.
Landis admitió que de no haber ganado el Tour este año su ilusión se hubiera esfumado posiblemente para siempre, ya que a los 30 años deberá someterse a la implantación de una prótesis en la cadera al final de temporada. "Hubiera sido frustrante no ganar el Tour y luego operarme y no tener más oportunidades de venir al Tour de Francia. Es el deporte más bonito y estoy orgulloso de practicarlo. Tal vez era mi última oportunidad", comentó.
El sucesor de Lance Armstrong admitió que su experiencia en el US Postal junto al texano fue muy positiva, aunque para intentar ganar el Tour debió tomar la decisión de marcharse. "Tuve suerte de formar parte de ese equipo. Pocos corredores han podido tener esa experiencia y vivir al cien por ciento por y para el Tour, sin dejar de pensar nunca que es posible conseguirlo"
Respecto al asunto del dopaje, Landis no es partidario de dar muchas explicaciones y solicita otro tipo de preguntas. "Es un tema que no quiero tratar. Mi deporte lucha contra el dopaje y trata de prevenirlo, y es por ello que tiene esta reputación. Son los padres los que tienen que explicar las cosas a sus hijos y enseñarlos, como hicieron mis padres conmigo", concluyó.