L D (EFE) La República Checa, único de los dieciséis equipos que suma sus comparecencias en la Eurocopa con victorias, han pasado de ser el equipo revelación a contar como uno de los grandes rivales para arrebatar a la selección anfitriona el sueño del título.
Los checos se han ganado a pulso su candidatura. Los tres triunfos en la primera fase han estado acompañados de buen juego y, además, en los tres compromisos han tenido que superar un marcador adverso. En el tercero, ante Alemania, jugaron con mayoría de suplentes sin que bajase su rendimiento. El partido ante Dinamarca puede ser el momento de la confirmación para los de Brueckner, quien volverá a alinear a sus mejores hombres tras concederles descanso ante los germanos.
Pavel Nedved volverá a ser de nuevo el eje del equipo. El hombre sobre el que gire todo el juego y al que prestarán más atención los jugadores daneses. Posiblemente su marcador sea Thomas Helveg, quien conoce al checo perfectamente después de haber militado once años en la liga italiana; en el Udinese, Milán e Inter de Milán.
Aunque los daneses sólo han vencido a la República Checa en una ocasión en 18 enfrentamientos, están con la moral alta después de haber logrado el pase a los cuartos de final tras el empate con Suecia (2-2). Para ello, Helveg comenta que saldrán al campo con "un gran espíritu". Morten Olsen, técnico danés, no podrá contar con Niclas Jensen, que sufre un fuerte corte en el pie derecho y su sustituto será Kasper Bogelund. Además, mantiene la duda de Ebbe Sand. Sand arrastra una lesión muscular desde el partido de la primera fase ante Italia, lesión que se le agravó en el encuentro contra Suecia.
Los checos se han ganado a pulso su candidatura. Los tres triunfos en la primera fase han estado acompañados de buen juego y, además, en los tres compromisos han tenido que superar un marcador adverso. En el tercero, ante Alemania, jugaron con mayoría de suplentes sin que bajase su rendimiento. El partido ante Dinamarca puede ser el momento de la confirmación para los de Brueckner, quien volverá a alinear a sus mejores hombres tras concederles descanso ante los germanos.
Pavel Nedved volverá a ser de nuevo el eje del equipo. El hombre sobre el que gire todo el juego y al que prestarán más atención los jugadores daneses. Posiblemente su marcador sea Thomas Helveg, quien conoce al checo perfectamente después de haber militado once años en la liga italiana; en el Udinese, Milán e Inter de Milán.
Aunque los daneses sólo han vencido a la República Checa en una ocasión en 18 enfrentamientos, están con la moral alta después de haber logrado el pase a los cuartos de final tras el empate con Suecia (2-2). Para ello, Helveg comenta que saldrán al campo con "un gran espíritu". Morten Olsen, técnico danés, no podrá contar con Niclas Jensen, que sufre un fuerte corte en el pie derecho y su sustituto será Kasper Bogelund. Además, mantiene la duda de Ebbe Sand. Sand arrastra una lesión muscular desde el partido de la primera fase ante Italia, lesión que se le agravó en el encuentro contra Suecia.
República Checa: Cech; Grygera, Ujfalusi, Bolf, Jankulovski; Poborsky, Galasek, Rosicky, Nedved; Baros; y Koller
Dinamarca: Sorensen; Helveg, Laursen, Henriksen, Bogelund; Gronkjaer, Gravesen, Daniel Jensen, Joergensen; Ebbe Sand o Claus Jensen y Tomasson
Árbitro: Valentin Ivanov (Rusia)
Estadio: Dragón de Oporto. 20,45 horas (TVE 1)