El diario francés La Provence, que cita fuentes de la investigación, indicó que los policías requisaron diversos documentos contables sobre la transferencia de Franck Ribery al equipo, y de la contabilidad del OM en ese periodo para comprobar qué movimientos de dinero hubo con el Galatasaray turco al que se compró el futbolista, y con su agente en ese momento, Bruno Heiderscheid.
Precisamente Heiderscheid está en el origen de estas operaciones puesto que fue él quien el 29 de noviembre del pasado año presentó una denuncia contra Ribery, contra el presidente del Marsella, Pape Diouf, contra el secretario general, Julien Fournier, y contra el abogado Jean-Jacques Bertrand, que había hecho de árbitro en su contencioso con el internacional francés.
La denuncia la había formalizado después de que el Tribunal Arbitral del Deporte hubiera ordenado en abril de 2008 al ex agente de Ribery que le restituyera 600.000 euros que el futbolista había abonado poco antes de decidir unilateralmente la ruptura del contrato que los unía en mayo de 2007 para asociarse con otra pareja de agentes, Alain Migliaccio y Jean-Pierre Bernès.
Heiderscheid, que también acusa al OM en tanto que persona moral, ha denunciado un complot contra él de los otros actores de este contencioso, que según su testimonio falsificaron pruebas e hicieron falsos testimonios en la audiencia ante el Tribunal Arbitral del Deporte.