El Málaga visita este jueves (22:00 Gol T / C+Liga) el Santiago Bernabéu con el impulso que le ha dado abandonar el farolillo rojo y, sobre todo, con la motivación de su entrenador, que abandonó la casa blanca firmando unos números en Liga inmejorables, y quiere demostrar su valía ante Florentino Pérez.
Manuel Pellegrini dijo el lunes en la sala de prensa de La Rosaleda que espera recibir "un gran apoyo del Santiago Bernabéu". No tiene por qué ser de otra manera, ya que el técnico nunca ha dicho una palabra altisonante ni cuando estuvo en el club ni cuando lo abandonó, mientras ha sido agraviado desde ciertos medios de comunicación aun cuando su aventura en Chamartín finalizó.
El público del Real Madrid es exigente, y pitó el año pasado a Pellegrini porque no consiguió ningún título. Sin embargo, por lo general, el recuerdo que se tiene del chileno es de un hombre prudente, educado, que no dijo ninguna mala palabra y que, en el fondo, no lo hizo tan mal en el club como algunos han querido ver. Por lo menos en la Liga, mantuvo el pulso hasta la última jornada
Desde que el Real Madrid fue apeado de la Champions League por el Olympique de Lyon, en el enésimo fracaso en octavos de final, Pellegrini había firmado su defunción como técnico de los blancos. El chileno tenía el apoyo del director general, Jorge Valdano, pero Florentino Pérez no podía arriesgarse a otra temporada en blanco, como la anterior, y decidió sentar en el banquillo a un ganador contrastado como a Mourinho, en vez de a un prometedor entrenador que fracasó en su primera temporada con el gran desembolso en verano en jugadores de la talla de Cristiano Ronaldo, Benzema o Kaká.
Pellegrini fracasó estrepitosamente en la Copa del Rey –eliminado con el ‘alcorconazo’- y en la Champions. Eso es indudable, pero también es cierto que hizo historia en la Liga, consiguiendo el mayor número de puntos nunca logrados por el Madrid. Los 96 puntos al final de la temporada no influyeron en la decisión del presidente, que consideraba que el chileno le había fallado en las citas clave –Alcorcón, Lyon y Barcelona-.
El destino ha querido ser caprichoso y, tras no encontrar banquillo a principios de temporada, el jeque del Málaga echó mano del ‘Ingeniero’ en sustitución del portugués Jesualdo Ferreira. De momento, no ha conseguido sacar al equipo de la Costa del Sol del pozo, pero visita el Bernabéu con ganas de callar algunas bocas e imprimir moral a una plantilla que, al igual que el año pasado, ha sido confeccionada a golpe de talonario para conseguir unos objetivo que, de momento, no está cumpliendo.
Veremos si, al final de temporada, el Real Madrid tampoco consigue ningún título porque se está encontrando con el mejor Barcelona de la historia. De momento, Mourinho ha mejorado al chileno en la Copa del Rey –le ha llevado a la final- y no es descabellado que le supere en la Champions tras el empate de Lyon, pero en la Liga, el torneo de la regularidad, los números son peores. ¿Se tendría más paciencia con Mourinho o le echarían como a Pellegrini?