L D (EFE) El español Carlos Sainz, compañero de equipo de Loeb, sube de la cuarta a la tercera plaza y se sitúa quinto en el Mundial de pilotos, a 16 puntos del francés. El estonio Markko Martin (Ford Focus WRC) pasa a la segunda plaza de la carrera, mientras que el noruego Petter Solberg (Subaru Impreza WRC), actual campeón mundial y que acabó sexto, sube a la quinta plaza, la que hace diez días ocupó Harri Rovanpera.
El resultado final del Rally de Chipre, disputado entre los días 14 y 16 de mayo, estaba en suspenso después de que en las verificaciones posteriores a la quinta cita del Mundial se encontraran diferencias en las bombas del agua de los Peugeot 307 WRC y los Citroen Xsara WRC, cuyas bases de los motores deben ser idénticas.
El reglamento para el Mundial de Rallys de la FIA exige que las bases de los motores sean iguales a las utilizadas por los modelos de serie de los coches que participan en el campeonato. En las verificaciones posteriores al rally chipriota, en el que los Peugeot acabaron en los puestos primero (Gronholm) y quinto (Rovanpera), y los Citroen se clasificaron segundo (Loeb) y cuarto (Sainz), los comisarios técnicos apreciaron diferencias en las bombas del agua de ambas marcas.
Tres días después de la carrera se analizaron en Limasol los motores de los coches implicados. En dichos estudios se apreció que las bombas del agua usadas por Citroen son las mismas que llevan sus coches de calle, mientras que sí se hallaron divergencias en las de los Peugeot. Así, la FIA ratificaba entonces la validez de los motores de los coches de Loeb y Sainz, mientras que convocaba para este miércoles a los responsables de Peugeot para que explicaran los motivos de dichas variaciones en sus bombas del agua.
Este miércoles en París, y tras una reunión de más de tres horas, la FIA ha ratificado que las bombas del agua de los Citroen Xsara cumplen con el reglamento técnico, no así las de los Peugeot, cuyos pilotos han sido excluidos de la quinta prueba del Mundial. Gronholm, dos veces campeón mundial, se queda sin victoria y sin liderato en el Mundial de pilotos. Peugeot ya ha anunciado que, pese a tener derecho, no va a recurrir esta decisión. Su director deportivo, Corrado Provera, se ha mostrado decepcionado porque ha quedado constatado que la escudería no actuó con mala fe.