(Libertad Digital) El fútbol catalán seguirá las mismas pautas que el resto de deportes de la Autonomía. La mano de ERC se deja notar en las palabras de Jordi Roche, el presidente de la FCF, quien este domingo ha cargado con dureza contra Ángel María Villar, al que acusa de haber convertido la RFEF en una institución "cerrada y muy mal gestionada".
Lejos de querer una modernización empresarial de la Federación, Roche pretende encontrar aquí una plataforma para sus ansias nacionalistas. Por eso va a apoyar a Mateo Alemany, quien cree que "respetará la selección catalana como lo haría cualquier dirigente que le guste el deporte y el fútbol". Añade además que si el ex presidente del Mallorca gana las elecciones, la selección autonómica catalana "avanzará en este aspecto y podrá jugar cuando se considere oportuno sin los problemas que nos pone Villar".
La raíz de este conflicto está en la negación del permiso que recibió la FCF para jugar un partidos amistoso contra Estados Unidos el pasado 14 de octubre. Roche insiste en que "no hay ninguna normativa" que impida la disputa de un amistoso en las fechas elegidas por la FIFA para los partidos entre naciones, cosa que no ocurría con éste. La selección de Norteamérica se echó atrás y la FCF lo intentó con Costa de Marfil, pero tampoco salió adelante.
Por otro lado, Roche ha criticado a Joan Laporta: "No está en la Federación para representar al fútbol catalán". El presidente del Barcelona se abstuvo de votar en la Asamblea de la RFEF que iba a dar permiso al partido de la Cataluña contra Estados Unidos.