L D (EFE) Divididos en dos grupos, los enviados del COI recorrieron Madrid y su Comunidad, pisaron el césped del Bernabéu y del Calderón, se mancharon los zapatos de tierra en Aranjuez, aplaudieron la majestuosidad del Rockódromo y tuvieron un encuentro inesperado con la infanta Elena en el Club de Campo de Madrid. A las nueve de la mañana, un equipo formado por la marroquí Nawal el Moutawakel, presidenta de la Comisión de Evaluación, y por el director ejecutivo del COI, el suizo Gilbert Felli, más la holandesa Els van Breda Vriesman, el canadiense Patrick Jarvis, el argelino Mustafá Larfaoui, el sudafricano Sam Ramsamy, el namibio Frankie Fredericks y el suizo Philipp Bovy se encaminó hacia el Hipódromo de la Zarzuela, una instalación hoy abandonada y que no acoge carreras de caballos desde 1996.
Allí les esperaba la infanta Pilar de Borbón, miembro del COI y presidenta de la Federación Hípica Internacional. No fue el único encuentro con algún miembro de la Familia Real, porque en la siguiente escala, el Club de Campo Villa de Madrid, la infanta Elena interrumpió su entrenamiento de equitación para saludar a los representantes olímpicos. Luego se trasladaron a la Casa de Campo -donde Fredericks aplaudió las instalaciones del Rockódromo-, a los terrenos de la Caja Mágica de tenis y al Palacio de los Deportes, que este sábado volvía a acoger una competición después de casi cuatro años cerrado como consecuencia de un incendio en el que sólo sobrevivió su fachada. Los evaluadores del COI fueron los primeros en sentarse en las flamantes gradas del Palacio.
El grupo se desplazó finalmente al Santiago Bernabéu, donde se encontró con sus compañeros Bob Elphinston y Simon Balderstone, de Australia, Ser Miang Ng, de Singapur, y Paul Henderson, de Canadá. A este equipo le tocó ver más tierra que cemento, porque estuvo en los futuros terrenos del Parque de Tiro de Paracuellos, del complejo de béisbol y sóftbol de Rivas-Vaciamadrid, del canal de aguas bravas del Parque de La Gavia y del canal de piragüismo y remo de Aranjuez, antes de trasladarse al Vicente Calderón y al Bernabéu. En cada una de estas sedes los miembros de la Comisión recibieron explicaciones e informes tanto de los arquitectos como de las autoridades deportivas y políticas.
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, el vicealcalde, Manuel Cobo, y el presidente de la candidatura, Felciano Mayoral, fueron de unas instalaciones a otras para acompañar a sus examinadores. Ya con el programa de la jornada a punto de concluir, los representantes olímpicos se dejaron llevar por la afición en el Bernabéu y Nawal el Moutawakel hizo un saque de honor y lanzó una tanda de penaltis a Frankie Fredericks. También fueron los primeros en jugar al fútbol sobre el recién plantado césped del Bernabéu, que parecía una alfombra. Antes, por la mañana, Sam Ramsamy también había cogido un palo de golf en el Club de Campo para dar unos golpes.
Los miembros de la Comisión están invitados a volver esta noche al estadio madridista para asistir al partido de Liga contra el Espanyol. Este domingo los evaluadores se encerrarán en su hotel para examinar los capítulos pendientes -Paralímpicos, Medios de Comunicación, Aduanas, Aspectos Médicos, Tecnología y Cultura-. Alguno de ellos podría escaparse para visitar un par de hoteles de la ciudad. Una conferencia de prensa de la Comisión del COI al completo y otra posterior de Gallardón, Cobo y Mayoral pondrá fin a los trabajos de los enviados olímpicos, que abandonarán Madrid el lunes por la mañana.