El tenis femenino española ha vivido una nueva jornada negra en Australia. Las tres últimas raquetas que quedaban en liza han sido apeadas en segunda ronda, uniéndose así a Anabel Medina, Arantxa Parra y Laura Pous.
Lourdes Domínguez opuso poca resistencia a la italiana Flavia Pennetta, vigésimo segunda favorita, quien se adjudicó la victoria en dos cómodos sets, 6-2 y 6-2. La jugadora gallega, 84 del mundo, fue presa de su mal comienzo tras perder cuatro juegos consecutivos. Mejoró después, pero no lo suficiente como arrebatar la victoria a su rival.
La siguiente en caer ha sido Carla Suárez, quien poco ha podido hacer ante la belga Kim Clijsters, tercera favorita del torneo, y que se ha impuesto por 6-1 y 6-3. Por lo menos, la canaria salió de la pista Rod Laver Arena del Melbourne Park con algo más de lustre que la rusa Dinara Safina, humillada por la belga en primera ronda (6-0 y 6-0).
Clijsters no permite concesiones y Suárez, que intentó hacer frente a su rival, especialmente en el segundo set, fue incapaz de repetir la gesta que lograra hace dos años en este mismo escenario, cuando superó a la estadounidense Venus Williams y alcanzó los cuartos de final, su mejor papel en el primer Grand Slam del curso.
La última esperanza española estaba en María José Martínez, que tampoco pudo lograr la victoria ante la francesa Alize Cornet (7-5 y 6-1).