"Cuando no eres el mejor jugador del mundo, es que todavía tienes que progresar. Todos tenemos un objetivo. El mío es ser el mejor jugador del mundo", asegura el máximo goleador del Real Madrid esta pretemporada, con cinco goles, en una entrevista publicada este miércoles en el diario L'Équipe.
Madrid es diferente a Lyon, donde jugó desde 2005 hasta la pasada temporada, dice el internacional francés de 22 años, quien asegura haber descubierto que en el Santiago Bernabeu "marcar y hacer marcar no basta", sino que además "hay que crear espectáculo". "Verdaderamente he cambiado de vida. ¡Hay tanta pasión aquí! Es la locura", confiesa.
Se está integrando bien en el Real Madrid, equipo con el que fue presentado el pasado 9 de julio ante 20.000 espectadores, y asegura que el gran baluarte de su adaptación es su compatriota Lass Diarra. "Lass me ha ayudado mucho", dice el delantero por el que el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, pagó 35 millones de euros, y añade entre risas que no le falta equilibrio porque "Lassana se ocupa de todo".
Se siente cómodo porque se entiende bien con Cristiano Ronaldo, Raúl y Kaká, asegura, y porque sabe que está cuajando una buena pretemporada, por lo que cree que se ha ganado un puesto de titular en la primera jornada de Liga.