Colabora

Italia se topa con el muro danés en un partido para olvidar

Partido para olvidar el que han protagonizado Dinamarca e Italia en el estadio Don Afonso Henriques de Guimaraes. La puesta en escena del grupo C de la Eurocopa ha dejado a una squadra azzurra sin ideas frente a una dinamita roja con mayor criterio futbolístico y que ha tenido más tiempo el balón en sus pies. Se trata del primer empate entre ambas selecciones en sus once enfrentamientos.

(Libertad Digital) El partido resultó decepcionante del lado italiano. Una selección que sigue sin tener rumbo, sin nadie que tome el mando en el centro del campo y que se fía demasiado de su fortaleza defensiva y de algún toque genial de sus estrellas. Ante Dinamarca, a Italia sólo la funcionó la contención, pues los Totti, Del Piero y Vieri estuvieron más ausentes que presentes y tampoco llegó la chispa de Cassano durante la media hora que jugó.

Los inicios del partido ya empezaron a sentar las premisas de lo que iba a ser: una Italia sin criterio ante una Dinamarca que pronto hizo suyo el balón y que trató de crear ocasiones de gol, buscando las bandas de Jorgensen, por la izquierda, y de Rommedahl, por la derecha, para romper la defensa transalpina. Dinamarca estaba más sólida y brillante, movía más y mejor el esférico y estaba más presente y cerca del área rival. Una zona decisiva que vio, en el minuto seis, la caída de Tomasson tras una dura entrada de Cannavaro que el árbitro español Mejuto González resolvió con tarjeta amarilla para el danés. A Italia le quemaba el balón, apenas lo tenía en su poder (a la media hora, 67 por ciento de posesión para Dinamarca) y, ante la ausencia de fantasía y creación, sólo buscaba a Vieri con balones en largo, por encima de su centro del campo, para tratar de sorprender a la defensa danesa, en la que Laursen estuvo brillante.

Italia se limitaba a contener fiándose de su firmeza defensiva (Nesta estuvo excelente en el corte) para robar y lanzar el contragolpe. Y es que Del Piero tenía misiones más destructivas que constructivas y la gran estrella azzurra, Totti, estaba igual de ausente que sus compañeros. El jugador de la Roma, para quien Morten Olsen ordenó un marcaje zonal, apenas intervenía y sólo se hizo notar en un excelente y potente lanzamiento directo lejano de falta que obligó a Sorensen a despejar a saque de esquina. Cuatro minutos después fue Helveg el que puso en apuros a Buffon. Y en el minuto 33 Dinamarca volvió a asustar con un lanzamiento de falta al que Tomasson no llegó en una inmejorable posición. No obstante, lo mejor de todo el primer tiempo llegó en sus instantes finales: Sorensen salvó a su equipo con dos manos prodigiosas seguidas a disparos a bocajarro de Del Piero y Totti; y, en el 45, fue Buffon el que hizo lo propio a disparo raso de Jorgensen.

La segunda mitad vio rápido una ligera mejoría italiana, algo por otra parte nada difícil. Y, sobre todo, una excelente asistencia de Totti -ya jugando desde una posición más retrasada para eludir el marcaje- sobre Zambrotta, quien cruzó en exceso su disparo. En el minuto 57 fue un remate de cabeza de Vieri el que obligó a Sorensen a una buena intervención. Una acción que dio paso a la salida de Gattuso por un desafortunado Cristiano Zanetti. Trapattoni apostaba por la fortaleza física y las dotes de infatigable correcaminos de Gattuso en lugar de las bonanzas creativas, por ejemplo, de Pirlo. Eso sí, poco después, el técnico se jugó las bazas del chispeante Cassano (m.64), que sustituyó a un opaco Del Piero, que puso voluntad y poco más, y de Stefano Fiore (m.67), quien entró por un desatinado ítalo-argentino Mauro Germán Camoranesi. Las dos incorporaciones solicitadas por más de media Italia en las horas previas al partido.

Ahora sí, Italia presionaba y se volcaba sobre el rival. Pero Dinamarca no se descompuso, aunque su seleccionador reforzó su centro del campo con la entrada de Claus Jensen (m.69) y Kenneth Pérez, por Sand (m.69) y un fatigado Jorgensen (m.72). Es más, fue el equipo escandinavo el que más cerca estuvo de adelantarse en el marcador. Pero Buffon estuvo providencial ante los disparos de Tomasson y de Rommedahl. El último cuarto de hora fue más danés que italiano, pues está claro que pensar que Gattuso puede ser quien genere juego está en contra de toda lógica futbolística. Además, Totti y Cassano no aportaron nada. Al final, un empate justo por ocasiones de gol, si bien fue Dinamarca la que se hizo merecedor a algo más. Italia, desde luego, no se mostró como el equipo que es dado favorito al triunfo final. Totti, tampoco como la estrella de la Eurocopa.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario