L D (Europa Press) "Intenté ayudar con la compra de la dirección. Ellos deberían haber aceptado lo que yo ofrecí. Fue una muy buena oferta para todos los implicados. Les daba protección, pero ellos quisieron hacer las cosas solos", ha afirmado Bernie Ecclestone, patrón de la Fórmula 1.
Parece que el empresario británico tiene claro que sólo un milagro podría salvar la salida de Honda de la Fórmula 1. "Ahora todo lo que podemos hacer es tener esperanza y rezar", ha asegurado el magnate, cuya compra de la dirección podría haberle dado un lugar en la Asociación de Equipos de la Fórmula 1 (FOTA).
Ecclestone ha advertido a los constructores japoneses de que tenían tres opciones: aceptar la compra de la dirección, cerrar el equipo, o vender la escudería al Grupo Virgin del empresario británico Richard Branson, quien confesó que amaba la Fórmula 1 y estaría dispuesto a rescatar al equipo si se mejoras las condiciones ecológicas y económicas de la competición.
Finalmente, Ecclestone considera que la Fórmula 1 no puede quedarse sin ver en las pistas al brasileño Brunno Sena, sobrino del triple campeón del mundo, Ayrton, quien forma parte del equipo japonés. "Sería fantástico ver el nombre de Senna otra vez en la Formula 1", ha deseado.