(Libertad Digital) El Bernabéu se ha vestido este domingo de gala para acoger un partido de gala, un choque de los que pueden acabar haciendo historia y digno de la Liga de Campeones, aunque el objetivo sea otro: la lucha por el título de Liga. Y el Madrid acudió fiel a su cita con la afición para empezar acosando a un Sevilla que esperaba su oportunidad al contragolpe. Lo intentaron más y mejor los blancos, especialmente con una doble ocasión en el ecuador del primer tiempo, aunque se toparon con un Palop y una defensa serios en el césped del Bernabéu.
Fue entonces cuando llegó la reacción del conjunto andaluz, el mejor del mundo actualmente y el único español que sigue inmerso en la lucha por los tres títulos esta temporada. Puerta, un puñal por la izquierda, Kerzhakov y Kanouté avisaban con peligro a Iker Casillas, aunque acabaría siendo Maresca, un hombre que no ha contado mucho para Juande Ramos esta temporada, el que lograría el 0-1 a cinco minutos para el descanso. Kanouté, hasta ahora máximo realizador del campeonato, habilitó de cabeza para el italiano, quien se inventó una sensacional volea desde fuera del área ante la que nada pudo hacer el meta madridista. El gol era demasiado castigo para un Real Madrid que estaba jugando uno de sus mejores partidos en casa en lo que llevamos de campaña, especialmente con un Emerson ejemplar en el centro del campo.
Fabio Capello reaccionó tras el paso por vestuarios y realizó pronto un doble cambio para tratar de variar el guión del partido, dando entrada a Guti y Helguera en sustitución de Raúl y Miguel Torres, respectivamente. Especialmente providencial resultó la entrada del '14' blanco, que a los 62 minutos se inventó un pase de oro para que Van Nistelrooy se quedara solo ante Palop, le recortara en el área y la batiera con un gran disparo para colocar un justo empate en el marcador. Tuvo poco después el Sevilla la ocasión de volver a adelantarse en el marcador, aunque Dani Alves falló una clarísima oportunidad tras una buena jugada de equipo. Esa acción fue clave en el duelo, pues sólo siete minutos después (m.77) llegó el 2-1.Y de nuevo el gol nació de las botas de Guti, que se inventó un pase imposible para Robinho. El brasileño se quedó solo ante el portal sevillista para generar la remontada. Pero hizo lo mejor y lo peor: vio puerta, pero se quitó la camiseta para celebrar el tanto y se fue a la calle al ver la segunda amarilla.
El partido se calentó entonces y Aitor Ocio se fue a la ducha antes de tiempo al ver la roja directa por un codazo a Diarra. En pleno delirio en las gradas del Bernabéu, Van Nistelrooy marcó el segundo en su cuenta particular para situarse como nuevo 'pichichi'. Ya en el tiempo de descuento, Chevantón acortó distancias con un gran lanzamiento de falta. El 3-2 final deja el 'goal-average' particular como estaba, y eso puede ser mucho de cara a la lucha por el título liguero. Quedan cinco jornadas y, al final, el tiempo acabará por poner a cada uno en su sitio.
Real Madrid, 3: Casillas; Cicinho, Sergio Ramos, Cannavaro, Torres (Helguera, m.58); Emerson, Diarra, Beckham, Robinho; Raúl (Guti, m.58) y Van Nistelrooy
Sevilla, 2: Palop; Dani Alves, Aitor Ocio, Escudé, Dragutinovic; Maresca, Poulsen, Renato (Hinkel, m.63, Puerta; Kanouté y Kerzhakov (Chevantón, m.71)
Goles: 0-1, m.40: Maresca, de volea; 1-1, m.62: Van Nistelrooy, a pase de Guti; 2-1, m.77: Robinho, a pase de Guti; 3-1, m.84: Van Nisterlrooy, de cabeza; 3-2, m.93: Chevantón, de libre directo
Árbitro: Pérez Burrull (Colegio cántabro). Expulsó a Robinho por doble amonestación (m.78), a Aitor Ocio con roja directa (m.82) y a Luis Fabiano, que estaba calentando en la banda (m.73). Además, mostró tarjeta amarilla a Torres (m.39), Sergio Ramos (m.54) y Beckham (m.83), por parte del Real Madrid; y a Hinkel (m.66) y Chevantón (m.83), por el Sevilla
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima tercera jornada de Liga en Primera División disputado en el estadio Santiago Bernabéu disputado ante unos 80.000 espectadores. Lleno. Los Ultras Sur desplegaron una pancarta que expresaba su rechazo a que el Bernabéu fuese sede de una final de Copa, y donde posiblemente jugara el Barcelona