L D (EFE) Guti, que ha partido a primera hora de la tarde del miércoles hacia Madrid, deberá ser reemplazado por otro futbolista, aunque Iñaki Sáez no decidirá su nombre hasta después. El jugador del Real Madrid se lesionó mientras corría con el resto de compañeros a las órdenes del preparador físico Manuel Delgado Meco. Pisó el agujero de una boca de riego y se torció su tobillo derecho. De hecho, Sáez y su grupo de colaboradores han tomado medidas en el entrenamiento de este miércoles, al señalizar con unos conos las distintas bocas de riego existentes en el campo con el objeto de que no vuelva a ocurrir un percance similar.
Genaro Borrás, traumatólogo de la selección nacional, ha explicado que el madridista "esta mañana estaba mejor, pero no lo suficientemente mejor, porque la inflamación y el dolor habían bajado, pero no como para empezar a correr". "Entonces, pensando un poco en los plazos, la decisión mejor es que se vaya", comentaba el doctor, quien ha indicado que en este tipo de lesiones siempre hay posibilidades de recuperación, pero que había que forzar mucho y que "todos los riesgos que hay que asumir tienen un límite y se pasaría del límite con este tobillo".
Borrás, quien conversó también en la mañana de este miércoles con Alfonso del Corral, jefe de los servicios médicos del Real Madrid, opinaba que lo mejor era "no arriesgar" porque se iba a "forzar demasiado" y se podía correr un riesgo innecesario de recaída. El médico de la selección considera que el jugador madrileño "en seis u ocho días estará fenomenal, si no fuerza, si hace un tratamiento normal", así que considera que no debe haber ningún problema para que esté en la penúltima jornada liguera en el Vicente Calderón contra el Atlético de Madrid.