L D (EFE) García Ferrer, que también es presidente de la Federación de la Comunidad Valenciana, dice que que no se celebró ninguna reunión conjunta para examinar las posibles ciudades candidatas a albergar la final y deja entrever que en esta decisión pueden haber influido las próximas elecciones a la presidencia de la RFET.
"Toda esta polémica ha surgido por temas político-deportivos, porque pronto habrá unas elecciones a la presidencia de la Federación y hay un proyecto consensuado de varias federaciones, con el presidente de la de Madrid a la cabeza y eso, probablemente haya influido", comenta. "La decisión del presidente no ha sido consensuada. Yo soy vicepresidente y me enteré por la prensa, aunque ya sabía su intención por conversaciones en las que había mostrado cuál era su predilección. La decisión estaba tomada sin haber habido una reunión conjunta", añade.
"Le diría a Madrid que otra vez será"
El presidente de la Federación de la Comunidad Valenciana dice que aunque también habían mostrado su interés en ser sede de esta final sabía que era difícil tener opciones, debido a que la pasada temporada Valencia ya albergó una eliminatoria y Alicante fue el pasado fin de semana sede de la semifinal ante Francia. "Quiero felicitar a Sevilla y decirles que les apoyaremos en todo lo que nos sea posible, mientras que a Madrid le diría que tengan paciencia y que otra vez será", señala.
Por su parte, José Emilio Cervera, secretario autonómico del Deporte de la Generalidad Valenciana, ha expresado su malestar por no haber tenido ni siquiera la opción de haber presentado a la RFET una propuesta para ser la sede de la final de la Copa Davis. "Ha habido una decisión tomada con rapidez, para algunos con excesiva rapidez. Nos hubiera gustado tener la oportunidad de haber presentado nuestra propuesta, aunque luego el resultado final de la elección pudiera haber sido el mismo", dice. Cervera reconoce que la Comunidad "no estaba contenta" con esta elección, aunque matiza que "a partir de ahora apoyaremos a muerte a Sevilla".