El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, no quiso criticar este jueves la decisión del Comité Olímpico Internacional (COI) de otorgar los Juegos Olímpicos de 2016 a Río de Janeiro porque no tiene "por estilo echar la culpa al árbitro" en las derrotas. "Cuando no se gana, nosotros no tenemos por estilo echar la culpa al árbitro", aseguró Ruiz-Gallardón, en relación a las críticas hacia el presidente del COI, Jacques Rogge, y sus posibles instrucciones para dirigir el voto de los delegados hacia la ciudad brasileña.
Durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, la primera tras regresar de Copenhague, el primer edil dedicó más de media hora a contestar preguntas sobre la candidatura, el futuro de las aspiraciones olímpicas de Madrid y las posibles responsabilidades en el fracaso de la apuesta por conseguir los Juegos.
"Nadie de la candidatura ha hecho ningún tipo de crítica ni de comentario con relación a la actuación de Rogge", afirmó, preguntado sobre el malestar reinante entre los miembros de Madrid 2016 tras finalizar la elección con 66 votos para Río y tan sólo 32 para la capital española.
Por ello, quiso manifestar su "agradecimiento a todos los miembros del COI, al margen de su voto, y especialmente a Rogge, que ha llevado todo el proceso con una actitud muy receptiva hacia las ciudades candidatas". "Todo lo que hemos solicitado, lo hemos obtenido. Nos han ayudado mucho y no existe ningún tipo de reprocho", insistió.
Sin embargo, la realidad es que Madrid pasó la primera votación con 28 apoyos y terminó perdiendo con tan sólo cuatro votos más, tres en la última votación mientras prácticamente todos los delegados que apoyaron a Chicago (18) y a Tokio (20) se decantaron por Río una vez que sus primeras opciones eran descartadas. La ciudad brasileña se llevó finalmente el gato al agua con 66 votos.
Trasvase de votos
"No estamos seguros de que sólo fueran tres votos (los que ganó Madrid). Es más, sé que son todo especulaciones y es imposible saberlo porque el voto es secreto, lógicamente, pero yo tengo la impresión de que hubo un movimiento de votos entre las candidaturas. No creo que sólo tres de los votantes de Chicago y Tokio dieran su voto a Madrid, es perfectamente posible que Madrid recibiese votos en la primera votación que no recibiera en la segunda", opinó el primer edil.
Según él, esta tendencia, una "hipótesis" en el caso de Madrid, se confirma como "tesis" en el de Tokio, que cayó en la segunda ronda de votaciones. "Si se mira la evolución de Tokio se confirma que así ocurrió. Hubo miembros del COI que, aunque es difícil de explicar y entender, votaron a una ciudad y que, superando esa ciudad la prueba, su segundo o tercer voto no fue para la misma candidatura", apostilló.
Además, reiteró que "los sistemas de votación son así" y que "cuando se aceptan las reglas del juego hay que atenerse a ese sistema", pero concedió que "si en lugar de aplicarse un sistema de eliminación sucesiva se hubiera hecho como en un club de fútbol, Madrid tendría los Juegos porque ganó la primera votación".
"Sin embargo, las reglas del COI son así y nosotros las conocíamos y las aceptábamos, pero con otro sistema el resultado habría sido distinto, y que Madrid fuera la opción votada por más miembros del COI en la primera votación marca absolutamente las calidades que tiene que tener Madrid", zanjó.
Según él, ha ganado una ciudad que "el COI pensaba que estaba mejor preparada, en mejores condiciones o que tenía más motivos de merecimiento por otros factores", decisión que tanto él como el resto de responsables de la candidatura respetan "absolutamente". "Que haya otras opiniones colaterales por parte de personas, instituciones o medios de comunicación, es absolutamente razonable, pero en la candidatura tenemos el máximo respeto por los miembros del COI y por su presidente", aseveró.
Además, Ruiz-Gallardón reconoció que tanto él como sus colaboradores cercanos sabían el resultado de la votación cinco minutos antes de que se anunciara porque "cuatro miembros del COI –el presidente y los miembros de la Comisión Electoral– tenían conocimiento de la votación y, a través de una persona muy bien informada, se dijo que el resultado no era favorable para Madrid".
Con respecto a la información aparecida esta semana que apuntaría a que el presidente de Honor del COI, Juan Antonio Samaranch, habría recomendado a Gallardón no presentarse de nuevo en 2016 por miedo a la regla no escrita de rotación continental –Londres organiza los Juegos de 2012–, el primer edil apuntó que "esas declaraciones han sido desmentidas por el propio Samaranch", por lo que eludió hacer comentarios al respecto.
Tristeza
A continuación, el regidor madrileño reconoció que no ganar la apuesta olímpica la ha provocado "desilusión y tristeza" y que todos los miembros de Madrid 2016 lamentan "mucho" no haber conseguido los Juegos para dentro de siete años. "Estamos absolutamente convencidos de que, no habiéndolos conseguido, Madrid y España realizaron un papel a la altura de lo que se esperaba en todos los terrenos: el técnico y en las presentaciones", afirmó.
"Felicitamos a Río aquel mismo día y reiteramos hoy la felicitación. Es una ciudad a la que le deseamos todo el éxito del mundo para que organice unos magníficos Juegos. Y agradecemos al COI que nos haya atendido todos estos años y que haya seguido nuestra candidatura, pero lamentamos no tener el resultado que todos queríamos", concluyó.
Instalaciones y terrenos
Además del suelo para la Villa Olímpica, situado junto al estadio al otro lado de la M-40, el Ayuntamiento reservará de cualquier urbanización en los próximos años el terreno anejo a los pabellones de IFEMA en los que el proyecto para 2016 preveía construir los centros internacionales de prensa y televisión para los Juegos.
De las instalaciones deportivas previstas para 2016, Ruiz-Gallardón indicó que se terminarán el Centro Acuático, aunque sin la totalidad de las gradas proyectadas, que sólo serán cimentadas; y la pista de BMX del Manzanares, sufragada con cargo al Plan Estatal de Financiación Local y que estará en funcionamiento en los primeros meses de 2010.
El Real Madrid construirá su pabellón de baloncesto y el Ayuntamiento de Coslada su pabellón de voleibol, mientras que no se construirá el velódromo, la pista de voleyplaya de la Casa de Campo y la instalación de tiro de Paracuellos del Jarama.
Tampoco se llevarán a cabo los canales de remo y de aguas bravas, el pabellón de gimnasia y el estadio de hockey, aunque en este caso es seguro que también se reservará el suelo para no restar activos a otra posible candidatura olímpica de Madrid.
Respecto al estadio, el alcalde ha afirmado que el Atlético de Madrid, con el que el Ayuntamiento mantiene un acuerdo al respecto, iniciará en enero de 2010 las obras de demolición parcial de la estructura existente y el vaciado profundo del terreno y comenzará a principios de 2011 las obras sobre rasante.
El plazo de ejecución previsto es de 30 meses, de modo que el Atlético de Madrid podría jugar en su nuevo estadio la temporada 2012-13.
El alcalde se mostró "convencido de que la llama está ahí y debe seguir viva", aunque "no hay que tener ninguna precipitación de qué año es el adecuado" en caso de decidir volver a presentar una candidatura para los Juegos Olímpicos.