El Barcelona y el Racing de Santander están a punto de cerrar el fichaje de Pablo Torre, el centrocampista de 18 años que también quería fichar el Real Madrid. El club azulgrana era el mejor posicionado para hacerse con los servicios del jugador y ya tiene un acuerdo con el club cántabro. Torre tiene una cláusula de rescisión de 10 millones de euros, pero la intención del Barça es no pagar esa cantidad, por lo que las negociaciones continúan.
Xavi Hernández ha sido una pieza clave para que el joven talento acabe en la Ciudad Condal, su intervención ha hecho ver a Pablo y a su entorno la fiabilidad del proyecto azulgrana en el que los jugadores jóvenes son protagonistas. No hay mejor prueba de ello que el equipo actual, en el que futbolistas como Pedri, Gavi y Nico o son titulares, o cuentan con muchos minutos.
Pablo ya llamaba la atención de clubes grandes como la Real Sociedad, pero su enorme progresión en la actual temporada ha provocado que los grandes como Barcelona y Real Madrid hayan apostado por él. Torre ya ha sido internacional por España en la sub-19.
El Barcelona no quiere esperar, su fichaje trae de la mano un hueco en el primer equipo, entrando en dinámica con Xavi Hernández. Aunque contará con ficha en el filial para poder jugar no cortar el ritmo de competición los días que no vaya convocado. La intención del club es que juegue el mayor número de partidos posible ya sea con el primer equipo o con el Barça B.
El plan del Barça parece seguir un patrón claro: apostar por un grupo de jugadores muy jóvenes que serán la base del equipo en las próximas temporadas, y Torre entra dentro del proceso de reconstrucción de la plantilla