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Bilbao se compromete a albergar la Eurocopa aunque sea sin público

Este mes se analizarán los distintos escenarios y en abril se decidirá si finalmente se celebra el torneo y en qué condiciones.

Vista del estadio de San Mamés. | Cordon Press/Archivo

El Ayuntamiento de Bilbao mantiene su compromiso con la celebración de la Eurocopa de fútbol en la ciudad y trabaja "de forma intensa" para ser sede "en cualquier de los escenarios" que se puedan dar, en función de la evolución de la crisis sanitaria, según ha afirmado el concejal delegado del Área de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, Xabier Otxandiano.

El concejal ha comparecido este lunes en Comisión, a petición del PP, para informar sobre las previsiones en relación a la celebración finalmente este año de la fase final de la Eurocopa 2020 de fútbol, para la que Bilbao había sido elegida junto a otras once ciudades.

En su comparecencia, Otxandiano ha destacado que el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, ya dijo la semana pasada que el organismo europeo "mantiene las doce sedes, tal y como estaba previsto en el proyecto", y agradece "el esfuerzo por adaptar y adecuar" que están haciendo en el contexto de la pandemia del coronavirus. De este modo, ha añadido, "todas las ciudades sede, con todas las federaciones y con UEFA, integrando a los departamento de Salud correspondientes, seguimos trabajando en diferentes escenarios" ya que, a día de hoy, se desconoce "en qué condiciones o con qué público se podrá jugar en el mes de junio".

Según ha indicado, el proyecto "va bien", dado que "Bilbao está confirmada con ciudad sede y trabajando". De este modo, ha insistido en que la ciudad está "firmemente comprometida" con la celebración de este evento deportivo tanto si se celebra con público, con limitaciones de aforo o a puerta cerrada "o cualquier" otra opción. "En cualquiera de las circunstancias que se puedan dar, y son realmente complejas en este contexto, Bilbao está comprometido con el proyecto, está trabajando de manera intensa con UEFA para que siga siendo sede del proyecto —y estamos confirmados como sede— en cualquiera de los escenarios", ha insistido Otxandiano, que ha subrayado que, en todo caso, se va a ser "exquisitos" en la garantía de la salud y la seguridad de las personas.

En respuesta a las preguntas de los grupos de la oposición, el concejal ha explicado que, de los 5,5 millones de euros de financiación prevista entre las administraciones públicas vascas y la UEFA, Bilbao ha efectuado un gasto de 1,2 millones aproximadamente en los últimos tres años. Según ha añadido, el presupuesto "seguramente" se revisará "a la baja" si finalmente las condiciones sanitarias impiden que no se pueda ocupar la capacidad total de San Mamés.

Esa cantidad, ha agregado, no se podrá conocer "hasta que se avance en el proyecto" y, del mismo modo, el impacto económico tampoco se puede determinar en este momento, si bien, si se juega a puerta cerrada, "el retorno económico directo sería a todas luces menor".

En este sentido, ha explicado que a final del mes de febrero se debe remitir a UEFA "diferentes alternativas y se considerarán y, allá por el mes de abril, se adoptará un posicionamiento con carácter final". En todo caso, ha expresado el "compromiso con el sector del alojamiento, del turismo, de la hostelería" del Gobierno local y ha añadido que se va a hacer "todo lo posible por que el impacto sea el mayor de los viables, cuando llegue el momento".

Respuesta de los grupos municipales

Entre los grupos de la oposición, sólo el PP ha apoyado la postura del equipo de Gobierno local de seguir apostando por ser sede la Eurocopa. Su concejal Carlos García ha destacado que esta competición es, junto a los Juegos Olímpicos y el Mundial de fútbol, uno de los tres "eventos deportivos más importantes del mundo", por lo que ser sede es "algo histórico" para la capital vizcaína.

A juicio de García, si la situación sanitaria obliga a disputar los partidos "incluso sin público, a Bilbao le interesaría" ser sede dada "la repercusión mediática", sobre todo, en televisiones y, además, que puede ser "un salvavidas" para determinados sectores. En este sentido, ha animado al Ayuntamiento a ofrecer a Bilbao para ser sede también "en caso de que se reduzca el número de lugares donde se va a celebrar" la Eurocopa.

Por contra, el concejal de EH Bildu Asier González ha advertido al equipo de Gobierno de que estar esperando al desarrollo de la pandemia es como "encomendarse a la divina providencia". El edil ha alertado de que, en función de cómo evolucione la situación, el impacto económico puede ser "minus", teniendo en cuenta lo ya gastado. Asimismo, ha asegurado que, si la competición se juega sin público y con San Mamés como sede de la selección española, "España gana" y, sin embargo, "Euska Herria pierde las alubias y el sentido de nación".

Por su parte, la edil de Elkarrekin Bilbao Carmen Muñoz ha mostrado la oposición de su grupo a este tipo de eventos que "necesitan un importante desembolso" y que "discriminan a las mujeres que practican este deporte". En todo caso, ha apostado por que, "si hay una posibilidad de que no haya impacto económico, lo hay que hacer es no hacer" un evento que, según ha recordado, el Gobierno local ha defendido por su retorno económico.

Según ha advertido, si se disputan a puerta cerrada los partidos, "el impacto económico va a ser cero" y, por ello, no se debe "gastar más dinero y poner en riesgo la salud pública, por mucho que el Ayuntamiento respete lo que digan las autoridades sanitarias". "En este momento, que quedan tres meses hasta junio, lo que hay que hacer es echarse para atrás y decir que no lo vamos a hacer por responsabilidad con la salud de los bilbaínos", ha considerado.

Finalmente, desde los grupos del equipo de Gobierno, el socialista Alfonso Gil ha criticado a la oposición que pidan "hacer un ejercicio de la bruja Lola". "¿Ustedes creen que en Tokio el concejal de Desarrollo Económico está explicando qué va a pasar con los Juegos Olímpicos? No, porque hay una decisión", ha manifestado. Asimismo, ha subrayado que, además del impacto directo económico, existe "un impacto indirecto que es impagable". "¿Ustedes saben lo que es organizar aunque sea a puerta cerrada este evento? ¿Saben lo que vale a nivel publicitario, creen que podemos desdeñar esto después de gastar un dinero muy bien gastado?", ha concluido.

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