Joao Félix ha explotado en el Atlético de Madrid y aunque queda por ver si esa explosión tiene una onda expansiva que dure mucho tiempo, la afición rojiblanca tiene motivos para ilusionarse con su número 7. La principal razón para esa ilusión, aparte de las sensaciones sobre el terreno de juego, son los datos que acompañan al luso y que están muy cerca de superar a los que firmó la temporada pasada, pero en muchos menos meses de competición.
La temporada 2019/2020, la primera de Joao en el Wanda Metropolitano, finalizó con unos números discretos para lo que se esperaba de un fichaje que costó más de 120 millones de euros. El '7' jugó 36 partidos entre Liga, Champions, Copa y Supercopa y marcó nueve goles. Además, el portugués firmó tres asistencias. No son números de estrella, pero dentro de esa estadística hay que contar que Joao se perdió un total de 13 partidos por lesión, dos en los tobillos y una muscular, y que no fue titular indiscutible con Simeone. El Cholo quería dosificar a su nueva estrella al igual que hizo, por ejemplo, con Antoine Griezmann.
Tras esa primera temporada de adaptación, Joao Félix ha arrancado el curso 2020/2021 de manera arrolladora. Arrancó el año dejando inmejorables sensaciones ante el Granada y a partir de ahí no ha parado de marcar goles, dar asistencias y generar fútbol ofensivo. De momento, y estando solo a 3 de diciembre, Joao está a un solo gol de igualar lo que hizo la temporada pasada. En 4 meses firmaría lo hecho en un año.
Las estadísticas de Joao son actualmente de ocho goles y tres asistencias en 14 partidos jugados. Si marcase este fin de semana al Valladolid o frente al Salzburgo en Champions, el internacional portugués ya habría igualado lo hecho en el curso 2019/2020. Es una prueba más de la espectacular mejora que se está viendo en el segundo año del ex del Benfica.
Los datos ensalzan la figura de Joao en el Atlético, pero no son solo estadísticas sino sensaciones y apariciones en momentos importantes. Ante el Bayern abrió el marcador y en otros partidos importantes, como frente al Barcelona en Liga o Salzburgo en Champions, el atacante luso siempre dio la cara para liderar al equipo. Si sigue así va camino de igualar a otra perla rojiblanca que necesitó un año de adaptación para luego deslumbrar. Hablamos del Kun Agüero, que pasó de siete goles en 42 partidos a 30 en 53. Otros ejemplos son Griezmann, que pasó de 25 en 53 a 32 en 54 y Fernando Torres, de 7 en 37 a 14 en 32.