Libertad Digital continúa con su serial de entrevistas a entrenadores tras las realizadas a Pacheta, Paco Jémez, Asier Garitano, Irene Ferreras, Míchel González y Julio Velázquez. Ahora en nuestro séptimo episodio contamos con el técnico valenciano, José Luis Oltra. En su curriculum como entrenador lucen equipos como Catarroja, Castellón, Levante, Ciudad de Murcia, Tenerife, Almería, Deportivo, Mallorca, Recreativo, Córdoba, Granada y Racing de Santander.
De momento sin equipo y comentando partidos de Segunda División para Movistar, José Luis Oltra nos atiende en exclusiva para hablar de su método de trabajo y de su visión de los banquillos.
Pregunta: ¿Cuánto fútbol ve José Luis Oltra ahora que no tiene equipo para entrenar?
Respuesta: El entrenador cuando está libre, aparte de disfrutar de la familia y de los amigos como no puede hacer cuando tiene equipo, tiene la obligación de ver fútbol para estar al día y para conocer cómo está el mercado. En mi caso he tenido la suerte de que durante dos temporadas seguidas en las que no he arrancado dirigiendo a ningún equipo me han llamado de Movistar para comentar partidos y eso me permite estar todavía más al día de la categoría. Además son más de 400 partidos los que tengo en la categoría, por lo tanto la conozco bien (risas). Pero es cierto que comentar partidos me ayuda, sobre todo porque no solo voy y hago la retransmisión sino que intento prepararme durante la semana con datos del choque y documentación de los diferentes medios locales. Eso me permite estar activo durante la semana y con la mente centrada en la categoría.
P: Con 11 jornadas jugadas es el año en el que más destituciones han tenido lugar en Segunda. ¿Sigue siendo la figura del entrenador el eslabón más débil de la cadena?
R: Sí, así es. Somos el muñeco del pim pam pum. Es un gremio muy desprotegido. Entendemos todos cómo está montado esto, pero también sabe todo el mundo que no somos siempre los culpables absolutos de las victorias o de las derrotas. Aunque es cierto que en la victoria sí se suele dividir más. Creo que fue Valdano el que dijo que la victoria tiene muchos padres y la derrota es huérfana. En este caso parece que no es huérfana sino que la culpa es de los entrenadores siempre. Pero es algo que está montado así. Cuando estás fuera queremos que haya movimiento porque somos muchos, pero cuando estás dentro lo ves diferente. Aún así, estando dentro o fuera, lo veo bastante incongruente. También es cierto que en algunos momentos hay que cambiar cosas y lo más fácil es el entrenador de cara a revitalizar aspectos tácticos o emocionales, pero sí es cierto como comentas que somos un grupo muy desprotegido.
P: ¿Esta es la mejor generación de entrenadores, pero a la vez la más difícil en la que convivir por el gran número de técnicos que hay en la élite?
R: Desde hace tiempo está pasando esto. No creo que sea una cuestión de edad o generación sino de cómo va evolucionando el fútbol. Este deporte te lleva por delante si no te mantienes preparado y actualizado. Para eso debes rodearte de un buen equipo y de grandes profesionales. El fútbol ya no admite carencias. Antes se podía dejar de dominar algún aspecto, pero ahora tienes que conocer y dominar todo. Esa es una razón por la cual ahora hay más gente dentro de los cuerpos técnicos. Lo correcto es no dejar de formarte y estar al corriente de la evolución del fútbol, porque si no te reciclas el fútbol se encarga de hacerte a un lado.
P: A nivel metodológico, ¿piensa más en el rival, en su propio equipo o analiza el partido con un 50-50?
R: Hay que mirar a las dos partes pero no en un 50-50. Cuando yo preparo una semana básica mi equipo debe ser lo principal. Dedico una parte a mi modelo de juego, otra a lo positivo y negativo que he visto de mi equipo durante la última semana, todo ello de cara a corregir errores, y una tercera parte en función del rival y del choque que vamos a jugar. En la última miro las virtudes y defectos para saber cómo puedo hacer daño al rival. El entrenador que diga que solo mira a su equipo le va a faltar algo dentro del análisis. Luego puede ganar, pero le va a faltar algo. Hay que estar pendiente de absolutamente de todo.
P: ¿Hay mucha diferencia en los tics que tiene para entrenar y los que utiliza para analizar un partido cuando los comenta?
R: Lo que nos diferencia es que cada uno tenemos una sensibilidad futbolística, tanto con tu equipo como con el rival. En una época en la que hay muchos entrenadores y todos están muy bien preparados lo que nos diferencia es la gestión del grupo y del vestuario. Para mí eso es fundamental. A la hora de comentar o preparar un partido ocurre algo parecido. Hay que manejar todos los registros. Luego es una obviedad que hay diferentes tipos de entrenador. No es lo mismo Guardiola que Mourinho o Zidane que Simeone. ¿Por qué? Porque aunque cada uno domine lo mismo en criterios ofensivos y defensivos, cada uno tiene su forma y su modelo para llegar a conseguir sus objetivos, es decir, los resultados. Unos somos ofensivos, otros más defensivos... cada uno tiene su forma de ver el fútbol.
P: Estamos preguntando mucho por el formato de tres centrales en una defensa de cinco con los laterales como carrileros. No es un sistema nuevo, pero sí se está viendo más que antes. ¿Cómo analiza usted ese sistema?
R: Con los sistemas hay que partir de la base de que son solo posiciones de partida. Son formaciones o estructuras cuya verdadera importancia radica en cómo evolucionan dentro del juego. Como bien has dicho, el tema de los sistemas es mucho de modas y a veces vienen predeterminados para poder neutralizar a otro sistema que se está imponiendo. Como quieres contrarrestarlo buscas una formación que te permita hacerlo. De hecho este sistema por el que me preguntas lo puso de moda el Súper Depor con Arsenio para combatir al 4-4-2 que tan de moda estaba en aquella época. Todos los equipos jugaban con dos puntas y por eso se utilizaron los tres centrales, para tener superioridad en esa zona. Luego el sistema cambió porque los equipos pasaron a jugar con un punta intentando hacer daño metiendo a gente por detrás. Por eso se dejó de lado los tres centrales al ver que los equipos ya solo jugaban con un punta. Y ahora creo que son más posiciones de partida y no para ser más o menos defensivos sino para poder equilibrar al equipo y así tener gente por dentro y gente por fuera. Yo lo utilicé en su día cuando empecé a entrenar en Catarroja porque era algo que de jugador había vivido y lo conocía, pero luego cambié y el que más he utilizado es el 4-4-1-1 o el 4-2-3-1. Pero es que el año pasado llegué a Santander y volví a jugar mucho con tres centrales. Yo decía que era un 3-4-3 y desde fuera se veía como un 5-4-1, porque dependiendo de los jugadores es un sistema o es otro. Por eso te digo que los números dentro de los sistemas de inicio no me parecen tan relevantes. Si un equipo lo usa será porque le venga bien a su estilo o por ejemplo, a su salida de balón. Jugar con tres centrales te permite tener superioridad para avanzar una línea mientras que si tienes dos necesitas un medio que baje entre centrales para saltar esa línea. Esa puede ser una opción para utilizarlo.
P: ¿Qué le diría el Oltra entrenador al Oltra jugador sobre esta profesión de técnico?
R: Suena raro, pero yo siempre digo varias chorradas sobre este tema aunque las piense de verdad (risas). Oltra entrenador no pondría al Oltra jugador, porque era un centrocampista que o jugaba en un determinado modelo o me costaba mucho jugar en otro. No tenía mucho robo, mucho juego aéreo o demasiada llegada y por eso pienso que jugué poco. Quizá por eso también digo que me hice entrenador porque veía mucho fútbol desde el banquillo (risas). Esto lo digo de broma, pero es verdad. Ver el fútbol desde ahí te va ayudando a entender el juego. Además, yo fui muy respetuoso y muy buen compañero. Siempre intenté entender al entrenador y de jugador ya pensaba como ellos. Este tema depende de la persona. A todos los jugadores les cuesta no jugar o ser cambiados, pero de ellos depende cómo entiendan la explicación del técnico. Yo intento ser cercano, dialogar, seducir y convencer, pero hay veces que tienes que imponer porque no se pueden negociar todas las cosas. Como no puedes poner a todos de acuerdo, lo mejor es definir mi concepto, mi idea y el que no quiera aceptarlas debe dar un paso al costado. El fútbol es muy complejo y todos tenemos un entrenador dentro. Ahora todavía es más difícil poner de acuerdo a la gente con todo el tema de las redes sociales. Por eso hay que tener tu idea, estar tranquilo con tu conciencia y ser tú a fin de cuentas.
P: Siempre ha comentado que es un entrenador que mira mucho el ADN de los clubes. ¿Qué mira de cara a elegir un proyecto? ¿En alguna ocasión ha rechazado algo porque no se veía dentro de ese proyecto?
R: Hoy en día y viendo cómo está el panorama del fútbol los entrenadores tampoco tenemos mucho margen. Me gustaría tener la capacidad de poder elegir un proyecto u otro, pero no tenemos esa variedad de elección. Solo podemos ir eligiendo dentro de lo que nos va llegando y en mi caso me cuesta decir que no porque siempre intento ver lo positivo y porque trabajar en esta profesión me apasiona. Luego hay varios matices. Muchas veces tú puedes ver la historia de un club, pero su realidad actual no es la misma que la del pasado. Desde dentro, cuando conoces a las personas y a los jugadores, ves la verdadera realidad y hay que estar en el día a día para ver todo ese tipo de cosas, tanto a nivel de plantilla como a nivel de club. Puedes ver cómo se comportan en las buenas y en las malas, por ejemplo. Eso pasa con los jugadores y pasa con los proyectos. Te das cuenta rápido, también os lo digo. A mí me ha pasado. Pero también me ha pasado de llegar a un sitio y decir "ojalá salga todo bien porque me quiero quedar aquí mucho tiempo". Al final los clubes son lo importante y son lo que queda, no las personas que pasamos por ellos. Están por encima de todo. Pero por otro lado a los clubes los dirigen personas y ellos son los que le dan identidad. Por otro lado deciros que sí tengo claro el modelo de juego que tengo y el de club. Eso lo miro mucho. Lo comento en algunas charlas que tengo de fútbol. ¿Encajaría Mourinho en el Barcelona? Pues seguramente encajaría, pero de entrada chocaría porque inicialmente su estilo es opuesto al modelo del Barcelona. La otra anécdota que cuento es cuando yo llego a Tenerife. En mi primera etapa, la primera persona con la que tuve trato allí me dijo dos cosas. La primera que ganase el derbi ante Las Palmas y la segunda que intentase jugar bien al fútbol. Ahí comprendí que el fútbol que gustaba en la isla era el fútbol asociativo y de toque como se vio en la época de Valdano, por ejemplo. Hay que meter todo en una coctelera, tu modelo y el del club al que vas, y sacar lo mejor para ambas partes.