Gareth Bale estuvo el pasado verano con pie y medio fuera del Real Madrid. "Si Bale se puede ir mañana, mejor", llegó a decir Zinedine Zidane, en una rueda de prensa que hizo saltar todas las alarmas.
El galés lo tenía todo de cara para haberse marchado al fútbol chino, concretamente a las filas del Jiangsu Suning. El agente del jugador, Jonathan Barnett, había pactado el traspaso de Bale a este equipo de la Superliga (primera división), pero las negociaciones acabarían rompiéndose el pasado 28 de julio, a apenas 48 horas del cierre del mercado de fichajes en China, al no ponerse de acuerdo los dos clubes en la cifra del traspaso.
De esta forma, Bale ha terminado quedándose en el Real Madrid, donde cumple su séptima temporada tras haber llegado procedente del Tottenham, en agosto de 2013, a cambio de 101 millones, siendo el traspaso más caro en la historia del club blanco hasta la llegada del belga Eden Hazard el pasado verano por 105 millones.
Ahora, siete meses después de la frustrada marcha de Bale al fútbol chino, el técnico del Jiangsu Suning, el rumano Costantin Olaroiu, ha aportado más detalles sobre aquellas negociaciones que acabarían rompiéndose "de la noche a la mañana". "El fichaje estuvo muy cerca. El club llegó a un acuerdo con su agente. También llegamos a un acuerdo con el Madrid y, en el último mes, no sé qué pasó. Perdieron algunos partidos amistosos y el Madrid cambió de opinión", ha dicho Olaroiu, en declaraciones para The National de Dubai, en referencia a la abultada derrota que los blancos sufrieron por 7-3 ante el Atlético de Madrid en un amistoso jugado en Nueva Jersey, dentro de la International Champions Cup.
"Primero dijeron que lo liberarían y que tendríamos que pagar su ficha, luego de repente dijeron 'no, tenéis que pagar un traspaso'. Y pagar un traspaso y su salario se nos iba un poco del presupuesto, así que buscamos otro jugador. Sé que estaba hecho al 90% pero de la noche a la mañana todo cambió. Y lo hizo el Real Madrid, no nosotros", ha apuntado el técnico rumano del Jiangsu.