Testimonios ofrecidos por extrabajadores de un lujoso Swissotel de Lima apoyaron este domingo la versión de que el capitán de la selección de Perú, Paolo Guerrero, no fue responsable por el consumo de un mate contaminado que llevó a que fuera suspendido por la FIFA de toda actividad deportiva durante 14 meses.
El programa Domingo al día, de la cadena local América Televisión, entrevistó a cinco extrabajadores del Swissotel Lima, quienes indicaron que sí hubo irregularidades durante la atención a la selección peruana que se alojó en octubre de 2017 en ese hotel.
Anthony Obando, un mozo que atendió a la selección, afirmó que la contaminación se produjo porque Guerrero "estaba con fiebre y pedía té con limón", que se preparó en unas "jarritas" en las que también se servían los mates de coca.
Esta versión fue corroborada por el extrabajador George Zúñiga, quien señaló que él preparó el té para el futbolista en un recipiente en el que antes se sirvió un mate de coca.
El también exmozo Erick Paz apoyó la versión de la defensa de Guerrero de que se produjo una "contaminación cruzada" y sostuvo que Obando les contó que eso pasó porque con Zúñiga pidió "un té que no había pasado el procedimiento adecuado".
Otro extrabajador, identificado como Luis Escate, agregó que en la carta del lugar sí figuraba el mate de coca, mientras que Jordy Alemany, quien fue asistente de alimentos y bebidas, consideró que lo ocurrido fue responsabilidad exclusiva del hotel. Los entrevistados afirmaron que guardaron silencio durante este tiempo por temor a represalias, ya que si querían conservar su trabajo no podían preguntar sobre el tema. "Por una información como ésta mi vida podría correr peligro. Si algo me ocurre, es culpa del Swissotel", declaró Alemany, mientras que Paz aseguró que les indicaron lo que tenían "que decir".
Una nueva investigación
Tras conocerse estas declaraciones, la Fiscalía de Perú anunció en twitter que la Primera Fiscalía Provincial Penal del distrito de San Isidro, "analizará inmediatamente abrir nueva investigación en torno a esos hechos".
Añadió que será "una investigación distinta" a la que ya se lleva adelante contra el abogado del Swissotel Jaime Durand por presunta violación al secreto profesional y falsedad genérica.
El pasado 27 de marzo, el magistrado Arturo Zapata, del 29 Juzgado Penal de Reos Libres de Lima, ordenó procesar al letrado, al que Guerrero denunció por presuntamente haber mentido a la Agencia Mundial Antidopaje en las informaciones que remitió sobre las circunstancias que condujeron al dopaje.
El delantero fue sometido, tras el partido del 5 de octubre de 2017 ante la selección de Argentina en Buenos Aires, a un control antidopaje que dio positivo por benzoilecgonina, conocido por ser el principal metabolitode la cocaína.
Inicialmente la FIFA lo suspendió durante un año, pero luego rebajó el castigo a seis meses tras una apelación del futbolista, quien aseguró que había tomado en el hotel un té que estaba contaminado con mate de coca, algo que el Swissotel siempre negó que ocurriera bajo su responsabilidad.
Guerrero acudió al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) de Suiza para buscar su total absolución, pero recibió 14 meses de suspensión y solo un recurso extraordinario presentado en el Tribunal Federal de Suiza le permitió disputar con la selección de Perú el Mundial de Rusia 2018, donde anotó un gol ante Australia.
La sanción al delantero concluyó el pasado 5 de abril y desde ese momento quedó habilitado nuevamente para jugar en el Internacional brasileño y con la selección peruana.