En un sólo partido, el Borussia Dortmund sacó a la luz todas las vergüenzas que tiene el Atlético de Madrid de Simeone. La afición rojiblanca, casi dispuesta ya a manifestarse a las puertas del Wanda Metropolitano para que Rodrigo sea titular, vio desde su casa y algunos en directo en el Signal Iduna Park como su rival les hacía un roto histórico. Sí, histórico. Nunca antes con Simeone en el banquillo, el Atlético había recibido un 4-0 como el que se llevó en Alemania. Y se lo llevó en la competición que más ganas tienen de ganar.
Dicen que para reaccionar y salir de una idea equivocada y sostenida en el tiempo es necesario algo más que un revolcón en el barro. Hace falta que te tiren al suelo, te golpeen una y otra vez, puede que hasta cuatro veces como es el caso, y ya humillado en el suelo veas la realidad que tienes ante ti y que no has querido ver porque no te parecía tan grave. Quizá hoy el 4-0 de Dortmund sea una humillación exagerada, pero quitando el cómo, el Atlético tiene que encontrar el por qué.
Simeone recibió en Alemania un repaso que hasta la fecha nunca había recibido el técnico argentino. Lucien Favre le pasó por encima y del propio Cholo dependerá convertir la humillación en enseñanza. Eso pasa por un cambio desde el banquillo y ojo, también desde el césped. Ningún hipotético Atlético campeón de la Champions tendrá en su haber el nivel actual de jugadores como Koke, Griezmann, Juanfran o Diego Costa. Para bien y para mal, ellos lideran y, de momento, no lo están haciendo. Alemania mostró lo peor del Atlético. Ahora toca aprender o seguir equivocándose.
Calma previa a la tempestad
Empezó el partido en el Signal Iduna Park con un Atlético agresivo, intenso y muy serio, pero no a nivel defensivo como es habitual sino en el aspecto ofensivo, algo que pocos esperaban, sobre todo desde el banquillo local. Esa sorpresa inicial en el planteamiento de Simeone marcó la primera media hora de partido y los rojiblancos lograron lo que no es habitual en Alemania, es decir, ser los visitantes los que someten a los locales en los primeros veinte minutos de partido.
El Dortmund tardó mucho en darse cuenta de que su rival no le iba a regalar el balón como cabía esperar y el Atlético tuvo el tiempo necesario para subir la apuesta de sorpresa inicial a golpe real y efectivo en el marcador. Había comodidad, pero no atrevimiento. Había dominio, pero no oportunidades. En resumen, el Atlético desperdició el factor sorpresa y en cuanto tocó el interior de su cueva, no volvió a salir de ahí.
A partir de la media hora de juego, el Atlético empezó a ver el balón de lejos y cuando eso pasa hay un jugador que tiene que estar en el campo sí o sí y, nuevamente, no lo estaba. Rodrigo vio una vez más desde el banquillo cómo su equipo se rompía y el 1-0 marcado de rebote por Witsel fue el inicio del fin. Lo peor aún estaba por llegar.
Tormenta alemana y vergüenzas al aire
Dijo Godín tras acabar el partido que daba igual si el resultado era exagerado o no porque el 4-0 era real y nadie se lo iba a quitar de la espalda. Poco importa que Simeone corrigiese su fallo con Rodrigo y pusiese al '14' por Thomas al descanso. Tampoco sirve de nada que el Atlético hable de los 20 minutos iniciales del segundo tiempo en los que fueron superiores o de la cruceta que evitó un golazo de Saúl para empatar el partido. Godín no puso excusas al final del encuentro y la verdad es que no las hay.
Por suerte para los rojiblancos, su capitán no buscó escudos para esconderse y eso es una buena señal. Si el Atlético se defiende del 4-0 con 'y sis' jamás cubrirá las vergüenzas que exhibió en Dortmund. El Borussia tuvo más premio del que mereció, eso nadie lo duda viendo el cambio radical que sufrieron los visitantes con Rodrigo en el campo, pero los alemanes no tuvieron la culpa de la falta de pegada rojiblanca, del pésimo partido de Griezmann y Diego Costa o de encontrar cada vez que quisieron la autopista libre por la banda de Juanfran. Achraf no pedirá perdón por adelantar al lateral de Crevillente como si de un Ferrari se tratase. Cuando te ganan 4-0, las excusas no valen ni de adorno.
El Atlético sale de Alemania tocado, pero no hundido. Eso sí, las vergüenzas o se tapan pronto o serán crónicas.
Ficha técnica
Borussia Dortmund, 4: Bürki; Piszczek, Diallo, Zagadou, Achraf; Witsel, Delaney (Dahoud, m.35); Pulisic (Jadon Sancho, m.78), Gotze, Larsen (Guerreiro, m.62); y Reus
Atlético de Madrid, 0: Oblak; Juanfran, Godín, Lucas, Filipe; Koke, Thomas (Rodrigo, m.46), Saúl (Correa, m.70), Lemar; Griezmann y Diego Costa
Goles: 1-0, m.38: Witsel; 2-0, m.73: Guerreiro; 3-0, m.83: Jadon Sancho; 4-0, m.89: Guerreiro
Árbitro: Anthony Taylor (Inglaterra). Amonestó al local Diallo (m.13) y a los visitantes Thomas (m.35), Lemar (m.44) y Diego Costa (m.87)
Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada del grupo A de la Liga de Campeones, disputado en el Signal Iduna Park de Dortmund ante cerca de 80.000 espectadores