El FC Barcelona tuvo, el verano pasado, la posibilidad de traer a Kylian Mbappé desde Mónaco hasta la Ciudad Condal. Así lo ha revelado hoy Josep María Minguella, uno de los principales artífices de que Messi vistiese la camiseta azulgrana y un hombre muy ligado a la entidad, en una columna en Sport.
La pretensión de Mbappé de abandonar el AS Mónaco y tener la oportunidad de triunfar en un club grande durante el verano de 2017, hizo que se relacionase con muchos equipos, incluido el Barça. Los culés acababan de ver como Neymar, el teórico sucesor de Messi, se marchaba por una cantidad desorbitada rumbo al Paris Saint Germain. Con ello sus arcas quedaban llenas, pero su proyecto deportivo vacío.
Fue a partir de entonces, cuando se comenzaron a barajar diferentes opciones. Coutinho y Dembélé eran los favoritos y los que más gustaban para ocupar el hueco que había dejado Neymar. No en ese momento, pero sí a la postre, ambos terminaron llegando.
Con este panorama, Minguella habló con su hijo –también agente– y éste le contó que la familia y el abogado de Mbappé estaban dispuestos a seguir con el traspaso en caso de llegar una oferta. De todos modos, su entorno no tenía muchas esperanzas en que se fijasen en él pero, por si acaso, el padre del francés trasladó su número de teléfono al FC Barcelona.
El Barça, inmediatamente, desestimó la opción por no adaptarse al estilo de Valverde y comenzaron la operación por Dembélé.
Ahora, tras un excelso Mundial en el que ha mostrado unas cualidades extraordinarias, medio planeta fútbol vuelve a desearle, pero Mbappé ya ha insistido: él no se mueve de París.