Luis Rubiales, el nuevo presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) desde el pasado 17 de mayo, ha destapado un escándalo económico que tenían cerrado los anteriores gestores de la etapa de Juan Luis Larrea.
"Tengo un tremendo enfado porque hay un viaje pactado de la anterior directiva. Para directivos, patrocinadores y familiares que ronda los dos millones de euros. Me parece un despilfarro tremendo. El viaje está cerrado con la agencia y el dinero no se puede devolver. Creo que se debe viajar, invitar a los familiares de los futbolistas, pero organizar unas macrovacaciones de siete u ocho días en hoteles de superlujo... no estamos para eso. Ahora nos lo vamos a comer con papas", ha dicho Rubiales en declaraciones a los medios de comunicación en Villarreal, horas antes del amistoso entre España y Suiza en el estadio de La Cerámica.
Además, el dirigente dice que este ingente gasto afectará a las primas de los jugadores españoles que disputarán el Mundial de Rusia.
"Se va a tener que hacer, pero debemos llevar otro tipo de política.La orden la hizo Larrea, fue una orden verbal. Es un viaje para cerca de 155 personas y evidentemente va a afectar a la negociación de las primas de los jugadores para el Mundial", apuntaba el presidente de la RFEF.