Los campeones y las campeonas del Atlético de Madrid, el equipo masculino ganador de la Liga Europa y el femenino campeón por segundo año consecutivo de la Liga Iberdrola, pasearon durante la tarde de este viernes sus éxitos por Madrid, con el colofón en la simbólica fuente de Neptuno.
Los éxitos de los jugadores rojiblancos fueron celebrados este viernes en el Ayuntamiento de Madrid, la Catedral de la Almudena, la sede de la Comunidad de Madrid y en el lugar más esperado, la fuente de Neptuno, donde se congregaron varias decenas de miles de personas y desfilaron no sólo los primeros equipos, sino también la cantera.
Una celebración significativa por múltiples motivos, por el carácter conjunto entre las primeras plantillas masculina y femenina, por la complicada temporada del equipo dirigido por el argentino Diego Pablo Simeone, con sanción de la FIFA que le impidió fichar hasta enero y la adaptación a un nuevo estadio, el Wanda, y por un nombre propio: Fernando Torres.
"Quiero dedicar el título a Fernando, porque él es el Atlético de Madrid", definió el capitán rojiblanco Gabi Fernández. La sentencia muestra mejor que ninguna lo significativo del momento para el delantero madrileño, que cerrará su etapa como jugador rojiblanco este domingo ante el Eibar y ganó el miércoles en Lyon (Francia) su primer título con el club. El único que presentará ante Neptuno.
En ella disfrutó, se sumó a los capitanes para poner la bandera y la bufanda al dios del mar, notario de los triunfos rojiblancos, y se emocionó cuando tomó el micrófono para dirigirse a la afición. "Para todos los niños que tengan sueños, nada es imposible, y si eres atlético, menos", aconsejó. El suyo estaba cumplido.
La ruta triunfal de los dos equipos rojiblancos, incluido el juvenil A, ganador de Liga y de la Copa de Campeones esta temporada, comenzó en el Ayuntamiento de Madrid, al que llegaron sobre las 17.15 horas de la tarde, procedentes de la Ciudad Deportiva Wanda de Majadahonda.
Allí, en la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles, les esperaba la alcaldesa, Manuela Carmena, que agradeció a los "campeones y campeonas" haber "llenado la ciudad de Madrid de campeones", así como rememoró la final de la Liga Europa en Lyon, un partido en el que "fueron todo alegrías".
Junto a los capitanes, Gabi Fernández y Amanda Sampedro, agradeció a la alcaldesa su recepción el presidente Enrique Cerezo, particularmente efusivo, que recordó que estos títulos, especialmente el de la Liga Europa, ha sido logrado "en un año muy difícil", con la inauguración del nuevo estadio, el Wanda Metropolitano "el mejor del mundo o por lo menos de Europa".
Tras algo menos de una hora de encuentro con las autoridades municipales, los jugadores rojiblancos se encaminaron a la Catedral de la Almudena en autobús, aún cubierto, donde entró en primer lugar el capitán Gabi Fernández, con la copa de la Liga Europa, recibido en la puerta del templo por el arzobispo Carlos Osoro.
En una breve oración, Torres fue el encargado de ofrecer el trofeo a la patrona madrileña, la Virgen de la Almudena, acompañado por Amanda con un ramo de flores y escoltado por Gabi y el uruguayo Diego Godín.
Marcaba el reloj las 18:30 horas cuando los campeones rojiblancos se subían a los cuatro autobuses descapotables para hacer el recorrido que les iba a llevar a la sede de la Comunidad de Madrid.
En Neptuno ya se congregaban más de 1.500 personas y poco después desfilaban por la pasarela que precedía al dios Neptuno los equipos de la cantera rojiblanca campeones desde la categoría prebenjamín para recibir el homenaje de los atléticos. También las chicas, campeonas desde alevines.
Los pequeños hicieron más llevadera la espera con sus gestos: alguno de ellos imitaba al posar al francés Antoine Griezmann, haciendo la celebración de '7' al marcar gol, otros hicieron cantar a toda la plaza adueñándose del micrófono para cantar 'Enamorados del Atleti'.
Al filo de las 19.30 fueron recibidos los conjuntos rojiblancos en la Real Casa de Correos, sede de la Comunidad de Madrid, donde el recién investido presidente les dijo que el Atlético es "el equipo que más se parece a la realidad y a la vida", una vida que "está dando a los atléticos muchas satisfacciones".
Con una Puerta del Sol repleta de hinchas rojiblancos, los futbolistas del Atlético subieron al balcón de la Comunidad antes de emprender el periplo en el autobús descapotable de camino a su última parada.
No era otra que una fuente de Neptuno con ya decenas de miles de aficionados esperando, donde se homenajeaba al juvenil A, que salió junto a Manuel Briñas, el descubridor, entre otros, de Fernando Torres. "Empezamos 50 en el colegio Amorós y ver esto ahora es una alegría inmensa", manifestó.
La espera no se demoró mucho, porque alrededor de las 20.30 hacían entrada los cuatro autobuses con los campeones rojiblancos, que dieron una vuelta alrededor de la fuente y desataron la locura, especialmente el del equipo masculino, rodeado de humo rojo por dos botes que portaban Víctor Machín 'Vitolo' y Fernando Torres.
El Atlético Femenino fue el primero en pasear por la pasarela, con Amanda de nuevo al micrófono. "Yo por suerte sé lo que es estar ahí, donde estáis vosotros, desde pequeña me han inculcado que ser del Atleti es lo mejor que te puede pasar. Así que por favor, educad a vuestros hijos como se merecen, hacedlos del Atleti", reclamó.
La presentación del primer equipo masculino se hizo jugador por jugador y con canción personalizada para cada uno. Un 'rockero' Germán 'Mono' Burgos entró con el 'Satisfaction' de los Rolling Stones, la mayoría de los jugadores con reguetón y música bailable. Fernando Torres con 'Volver a disfrutar' de El Canto del loco. Y el guardameta Jan Oblak, con 'su canción', 'Obí, obá'.
Pararon la música para recibir al entrenador, el argentino Diego Pablo Simeone, con el "I'm so happy" de Pharrell Williams y el capitán, Gabi Fernádnez, con el trofeo en las manos y la banda sonora de 'La Guerra de las Galaxias'.
Tras los bailes y las presentaciones, llamaron a los capitanes (Koke, Godín y Gabi) para ponerle la bufanda a Neptuno, y junto con ellos a Fernando Torres. Subieron los cuatro la escalinata: Gabi le puso la bandera y la bufanda; Koke y Godín con sendos botes de humo, de color rojo y blanco y Torres junto a ellos.
Los discursos mostraron a un Torres muy emocionado, que recordó cómo hace 22 años él acudió a esa misma fuente a ver a los jugadores del 'Doblete' de 1996, mientras que su entrenador, Diego Simeone, sacó la "enseñanza" al título logrado.
"Nos dicen que hay dificultades en la vida, y claro que las hay, pero estos tíos las transforman en oportunidades, y las oportunidades son la posibilidad de ganar, y cuando ven la posibilidad de ganar, ganan", manifestó el entrenador.
Quien no quiso hablar fue el delantero francés Antoine Griezmann, con su futuro en entredicho y el interés conocido del Barcelona al que incluso el propio Simeone bromeó con pasarle el micrófono.
Con el 'We are the Champions' de Queen y papeles rojos y blancos al viento, pasadas las 21.30 horas, finalizó la fiesta del Atlético de Madrid, la de los campeones de la Liga Europa y las campeonas de la Liga Iberdrola. Y, por fin, la de Fernando Torres acudiendo a la cita con Neptuno.