El Olympique de Marsella se ha complicado su presencia en la próxima edición de la Liga de Campeones, empatando ante el Guingamp (3-3) en el duelo que abrió la jornada 37 de la Ligue 1 y en el que el técnico Rudi Garcia reservó a varios futbolistas y aprovechó las ausencias de Adil Rami y Luiz Gustavo, sancionados, para darles descanso de cara a la final del miércoles de la Liga Europa ante el Atlético de Madrid.
Con la mente puesta en Lyon, Rudi Garcia realizó cambios en busca de economizar esfuerzos de cara al encuentro ante los rojiblancos. El preparador francés reservó al guineano Bouna Sarr, Dimitri Payet y Yohann Pelé, que disputó los últimos 20 minutos tras la expulsión de Steve Mandanda, y la jugada no le pudo salir peor. Un empate inútil que si este sábado ganan Lyon y Mónaco significaría el adiós a la Champions vía liga —si ganan al Atletico sí estarán en la máxima competición continental—.
Los tantos iniciales de Valere Germain y Florian Thauvin, ambos fijos en el esquema marsellés, adelantaron al Marsella en la primera mitad pero Grenier, en dos ocasiones —el segundo de penalti— y Briand, también desde los once metros, le dieron la vuelta al partido ante un Marsella con 10. Pero el finalista de la Europa League sacó su carácter y orgullo para empatar por medio de Thauvin, que salvaba a los suyos.
Además del resultado cosechado, el equipo cuyo director deportivo es Andoni Zubirreta sufrió otra mala noticia. Sarr, que disputó los últimos 20 minutos, se resintió de una lesión reciente en el hombro y acabó el partido a duras penas, con evidentes gestos de dolor en su rostro.