Los jugadores del Real Madrid no entienden a aquellos que hablan de teorías arbitrales para beneficiarles. Y tras el Clásico, ante el Barcelona, se reafirman en su teoría. La actuación de Hernández Hernández sigue sin entenderse en el conjunto blanco. Desde la falta de Luis Suárez sobre Varane en el 2-1, pasando por el penalti de Jordi Alba sobre Marcelo y terminando por el acoso que recibió el colegiado por parte de Leo Messi en el túnel de vestuario.
Tras la expulsión de Sergi Roberto al borde del descanso, pasaron cosas en ese túnel. El primero en desvelarlo fue Sergio Ramos. "Se lió en el descanso. Messi metió presión al árbitro", dejó caer. Según han podido saber Libertad Digital y esRadio, el 10 del Barcelona fue más allá cuando fue a por Hernández Hernández.
Según testigos presenciales, Leo Messi, a escasos centímetros del colegiado, le dijo "te cagas"en varias ocasiones, le acusó de "regalarles cosas" y que no hacía falta que lo hiciera otra vez más porque ya "hemos ganado la Liga". Terminó con un contundente "esto es una puta mierda". El colegiado, como se pudo ver el acta, no reflejó nada de este incidente.
Fue un partido con mucha tensión y polémica. Como ironizó Ernesto Valverde, "con el VAR, aún estaríamos jugando". Sin embargo, el VAR no puede entrar a juzgar lo que sucede en el túnel de vestuario. Ahí es el árbitro quien no puede permitir este tipo de acciones amenazantes.