El Ramadán, última arma de los antimadristas a tres semanas de Kiev

El Ramadán es el noveno mes del calendario musulmán, conocido internacionalmente por ser el mes en el que los practicantes de esta religión —hay unos 1.600 millones de todo el mundo—, realizan el ayuno diario desde el alba hasta que se pone el sol. Este año tendrá lugar entre el martes 15 de mayo y el jueves 14 de junio, por lo que afectará de lleno a la final de la Champions que el Real Madrid y el Liverpool disputarán el próximo 26 de mayo en Kiev.

En el conjunto Red hay tres jugadores musulmanes que participan activamente del Ramadán como son dos de sus delanteros titulares, el egipcio Mohamed Salah y el senegalés Sadio Mané, además del centrocampista turco Emre Can, aunque este último lleva sin jugar desde marzo pasado por culpa de una grave lesión.

El lateral español Alberto Moreno bromeaba recientemente con esta circunstancia que vivirá Salah, la gran estrella del conjunto de Anfield: "Ahora le toca el Ramadán; comeré y beberé por él, es lo que puedo hacer".

Lo cierto es que no pocos aficionados ven en el Ramadán una nueva arma que puede aliarse con el Real Madrid de cara a la posible conquista de su decimotercera Copa de Europa. Así, tras rescatar argumentos como las bolas calientes en los sorteos de Champions, las supuestas ayudas arbitrales o la flor de Zinedine Zidane, muchos madridistas ahora se hacen eco del mes de ayuno de los musulmanes y se preguntan "qué será lo siguiente" que utilizarán los detractores del club blanco.

Cabe recordar que el Liverpool no es el único de los dos finalistas que tiene jugadores afectados por el Ramadán. Y es que el Real Madrid cuenta en sus filas con dos jugadores musulmanes como son Karim Benzema y Achraf Hakimi. Aunque aquí hay que destacar unos matices importantes: el delantero francés ha renunciado a realizar el ayuno para que no interfiera en su carrera como futbolista —la alimentación es un factor clave para cualquier deportista—; el internacional marroquí sí participa activamente del Ramadán, pero tiene poquísimas opciones de jugar la final de la Champions a pesar de la lesión de Dani Carvajal.