El Atlético de Madrid entra en la recta final de la temporada y pese a estar muy lejos ya del título liguero, la Europa League y el segundo puesto siguen siendo objetivos prioritarios para el equipo de Simeone. El problema que tiene el Cholo es que cada sanción o lesión le hacen temblar de nerviosismo y no es para menos. Ante el Deportivo en Liga, sólo tendrá 13 jugadores de campo.
El último partido en Villarreal ha dejado fuera de la lista frente al Dépor a Vitolo y a Griezmann. El primero vio la roja directa y el segundo cumplirá ciclo de amonestaciones asegurándose estar en el derbi madrileño ante Real Madrid. Estas dos ausencias se van a sumar a la de Filipe y Juanfran (duda) por lesión y habrá que ver si los compromisos internacionales no dejan ninguna secuela negativa para los intereses del cuadro madrileño.
Con tres o cuatro hombres fuera, Simeone mira a su plantilla y recuerda que ya no tiene a Miguel Ángel Moyá, Yannick Carrasco y Nico Gaitán. Sus salidas en el mercado invernal no se entendieron por diversos motivos y la afición desconfío, desde el primer momento, de las tres decisiones. Moyá escoltaba a Oblak, Carrasco era un jugador importante en la rotación y Gaitán podría tener minutos en caso de emergencia. A la luz de los hechos acontecidos con los problemas musculares de Oblak y que provocaron el debut de Axel Werner era lógica la preocupación de la hinchada rojiblanca. Hay que recordar también las salidas de Vietto y Augusto en enero.
La situación para el partido ante el Deportivo queda de la siguiente manera: 13 jugadores de campo, a la espera de que Juanfran pueda apurar plazos y recuperarse a tiempo, con Saúl, Giménez y Thomas con cuatro amarillas antes del derbi.
Simeone vivirá el parón por compromisos internacionales rezando para que no haya más bajas.