Xabi Alonso, exfutbolista internacional del Real Madrid, el Liverpool y el Bayern Múnich, entre otros clubes, se enfrenta a una pena de ocho años y medio de cárcel por fraude fiscal. La Abogacía del Estado, que actúa en representación de la Agencia Tributaria, ha pedido esta pena por tres delitos fiscales relacionados con sus derechos de imagen, según informa El Confidencial.
El caso fue archivado en su momento, pero ahora ha sido reabierto por orden de la Audiencia de Madrid. De prosperar la solicitud de pena en los términos solicitados por Hacienda, el tolosarra, que fue campeón del mundo (2010) y de la Eurocopa (2008 y 2012) con la selección española, correría riesgo real de ingresar en prisión.
Hacienda reclama a Xabi un total de 2,5 millones de euros por ingresos no declarados, provenientes fundamentalmente de derechos de imagen. Así, el deportista vasco habría recibido pagos de 4,9 millones de euros en la isla portuguesa de Madeira de marcas como Adidas, Gillette, Hugo Boss o Movistar, para las que fue imagen en su día.
El caso fue remitido a la Fiscalía en 2015 al considerar que Alonso había cometido delito de fraude con sus derechos de imagen al utilizar una sociedad radicada en Madeira, alejada del control fiscal. La Fiscalía no advirtió delito en el caso y, tras tomar declaración a las partes, ordenó que el caso fuera archivado.
El juez que instruyó el caso compartió el criterio de la Fiscalía al considerar que el exjugador no había cometido delito alguno al buscar la manera de pagar menos impuestos en un territorio de la Unión Europea que no está catalogado de paraíso fiscal.
Ahora, por los delitos presuntamente cometidos en 2010 y 2012, se solicitan tres años de cárcel para cada uno y por los de 2011, otros dos: en total, ocho años de prisión, además de la obligación de abonar 8 millones de euros por la cuota defraudada y la multa.