Josep María Bartomeu goza de buena salud y es una persona muy activa al frente del Barcelona y ejerciendo como presidente de la entidad azulgrana, pero a buen seguro que el día que conoció el interés real del City por Messi, su corazón tuvo más que un sobresalto.
Según informa Marcos López en el diario Marca, lo que siempre fue un rumor se hizo patente el verano pasado cuando el Manchester City de Pep Guardiola puso sobre la mesa de la familia Messi la siguiente oferta: 100 millones de prima de fichaje, 50 netos por temporada y cualquier detalle o capricho que el futbolista argentino quisiese estipular en su contrato.
A partir de ahí, Bartomeu necesitó poco y más para rápidamente ponerse manos a la obra y renovar a Messi, algo que ha tardado mucho en hacerse oficial. Tras la salida de Neymar, otra fuga, y concretamente la de Lionel, hubiese fulminado al Barcelona convirtiéndolo en un equipo sin rumbo.
Por suerte para la hinchada azulgrana, Messi dijo no a la increíble oferta del Manchester City y sigue liderando el proyecto del Barcelona a día de hoy.