Como bien adelantó en exclusiva el Grupo Libertad Digital, los temores del Gobierno y de La Liga se confirmaron pocos minutos antes del inicio del choque entre Girona y Real Madrid, con la presencia en el palco del destituido como presidente de la Generalidad de Cataluña, Carles Puigdemont.
Puigdemont se ha sentado en la zona noble de Montilivi junto a Florentino Pérez en un claro intento de reforzar a nivel mundial su propaganda independentista. El Girona como entidad no ha querido evitar este nuevo desafío y ha colaborado nuevamente con el sentimiento independentista que ha vivido esta semana su mayor afrenta al estado español.